NoticiaCoronavirus Durante la pandemia «estamos viviendo nuestra fe con intensidad» Luis Jiménez, misionero en Chiapas (México) Publicado: 19/05/2020: 13082 El que fuera delegado de Misiones de Málaga durante casi una década, el misionero de la Consolata Luis Jiménez (San Fernando–Cádiz–, 1948), atiende en la actualidad una comunidad en Tuxtla Gutiérrez, capital del estado de Chiapas en México. Un país que estos días inicia la reactivación económica tras sufrir los efectos del coronavirus. Los sacerdotes aquí en Chiapas estamos viviendo en este momento un doble sentimiento: por una parte con perplejidad, porque no esperábamos tener que dejar lo más querido y lo más profundo de nuestra vocación, el encuentro con el pueblo cristiano, la celebración de la Eucaristía como pueblo de Dios, toda la pastoral catequética, profética, de formación. Y sobre todo lo que aquí es más importante la celebración de actividades en las capillas, aquí las capillas son pequeñas comunidades de barrios y de colonias donde se realizan las reuniones y celebraciones, y esto nos deja un gran vacío, y aumenta nuestra soledad en este encierro al que estamos abocados. Pero por otra parte ha despertado también nuestra creatividad, hacemos transmisiones de la celebración de la Misa, transmitimos encuentros de jóvenes misioneros en línea, tenemos un contacto cercano con nuestra gente por WhatsApp, les mandamos material de formación, de reflexión y les damos ánimos para que el confinamiento sea más llevadero y estamos viviendo nuestra fe con intensidad y sobre todo con espíritu de familia, todo esto nos hace vivir nuestro sacerdocio con esperanza. Los sacerdotes estamos aprendiendo mucho de esta situación de pandemia. Se puede vivir el sacerdocio de otra manera. Estamos aprendiendo también porque tenemos más tiempo de la oración, tenemos en el corazón a todos los cristianos de nuestras parroquias, a los que les manifestamos nuestro cariño como buenos pastores, ahora también en el ejercicio de la caridad ayudando a los más vulnerables a superar las grandes dificultades que trae la pobreza, la carencia de lo más necesario para vivir con dignidad. Los sacerdotes aquí en Tuxtla Gutiérrez, estamos creciendo en profundidad sacerdotal, recordando aquellas palabras que se nos dijeron en la ordenación: "conforma tu vida con el misterio de la cruz del Señor".