Hace casi una década que no concurrían dos candidatos a la elección para el cargo de Presidente de la Agrupación de Cofradías de Pasión de Málaga, y por ello la expectación se palpaba en el ambiente de los viejos y remozados muros de la Iglesia de San Julián, sede de la Agrupación. Con una lectura de la Palabra de Dios -"Los jefes de las naciones las tiranizan… no será así entre vosotros… el que quiera ser el más importante, sea el servidor… el Hijo del Hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y dar su vida..." (Mc 10, 35-45)- el delegado diocesano de Hermandades y Cofradías, Francisco Aranda, abrió la sesión del Cabildo. «Elegí este texto porque, a mi entender, es el vademecum de un buen cristiano y cofrade», afirma.

Todo se desarrolló con la mayor normalidad y en buen ambiente, algo caldeado por el calor y lo reducido del templo, en cuyo interior, además de todos los miembros del cabildo con derecho a voto, antiguos presidentes, otros invitados y la prensa, hubo que colocar una cabina y una mesa con las papeletas de la votación.

El resultado ha sido de victoria por mayoría, en primera vuelta, del candidato Eduardo Pastor -102 votos a favor- por 89 de Pablo Atencia, el otro candidato; 2 en blanco que suman un total de los 193 votos emitidos.

Francisco Aranda agradeció a los dos candidatos su actitud en una competición que definió «digna, como la Eurocopa», y ha manifestado que la tarea «empieza ahora. Esto ha sido un acontecimiento destacado, pero lo importante es colaborar, no restar ni sumar. Aquí no caben términos como oposición, sino colaboración». Asimismo, el delegado asegura que «los sacerdotes, consiliarios y el Obispado entendemos la importancia del movimiento cofrade. Yo, desde ya, les reitero que pueden contar conmigo».

En el uso de la palabra final, el presidente saliente, Rafael Recio, agradeció la noble pugna y la calidad cristiana y humana de los dos grandes candidatos y mejores cofrades; Pablo Atencia elogió a los que le habían apoyado y prometió trabajar codo con codo con el candidato vencedor; Eduardo Pastor, a su vez, tuvo palabras de gratitud para cuantos habían confiado en él, para el presidente saliente -que en todo momento le había alentado- y, sobre todo, para su esposa. 

Con el reconocimiento de Aranda de lo "discreto, elegante y mesurado" del cabildo, los participantes rezaron un Ave María a María Santísima, Reina de los Cielos, titular de la Agrupación de Pasión.