Como señala el sacerdote malagueño e historiador Rafael Gómez Marín, «el Seminario es el sueño del obispo don Manuel González. Desde que llega a Málaga en 1915 como obispo auxiliar, su primera mirada preocupante fue para el Seminario: “Estrechas estancias, pisos elevados, patios sombríos, paredes y suelos siempre mojados de humedad y jamás visitados por el sol, clases iluminadas con luz artificial en pleno día... Añadido a este cúmulo de condiciones antihigiénicas, el contraste y ensor­decedor ruido producido por el martillo de varios marmolistas y zapateros establecidos en la calle a que da la fachada principal, por la bullanguera música de todos los pianillos callejeros que nunca faltan con su obligado cortejo de cantaores y bailadores improvisa­dos, por el griterío de vecinos y criadas que se hablan y se cuentan todo de un balcón a otro, de vendedores ambulantes, del tropel de gente, que por ser calle céntrica, perennemente circula por ella, y a juzgar por las risas, gritos, coplas, peleas e imprecaciones que a toda hora se oyen desde cualquier rincón del Seminario, esta gente malagueña ha  resuelto el problema del movimiento continuo o el de la diversión perpetua"

“Por ello, me metí en la locura (así la llamaban no pocos amigos cuerdos) de levantar un nuevo Seminario con un capital de 000 pesetas y de millones de confianza en Él, en unos montes cercanos a la ciudad con arquitectura a la andaluza, puesto que para Andalucía es, con mucho aire, sol, cal blanca, azulejos y sobre todo mucho gráfico”».

Con fecha "Primer viernes de noviembre de 1918", el obispo Manuel González, administrador apostólico de la diócesis firma la institución de la "Junta Directora de la Obra del Seminario Nuevo". Presidida por el propio prelado que suscribe, cuenta con la vicepresidencia del "M. I. Sr. Prefecto de Estudios, Dr. D. José María Giménez Camacho, y Sr. Ar­quitecto Diocesano D. Fernando Guerrero Strachan". Como vocales aparecen los nombres de: "Sr. Rector del Seminario, D. Tomás To­rrente; Sr. Ingeniero, D. Rafael Benjumea;  Sr. Jurisconsulto, Dr. D. Luis Suárez A. de Fra­ga; Sr. Higienista, Dr. D. José Gálvez Ginachero; Sres. Contadores, Dr. D. Tomás Jiménez del Río, y D. Fernando Loring  artínez; Señor Agricultor PPerito, D. Félix Corrales». Asimismo, D. Rafael Benjumea aparece como gerente apoderado y Francisco Martínez Navas como secretario.