NoticiaBioética Fernández-Crehuet: «La ética es una deficiencia en muchas carreras» Publicado: 16/12/2014: 13669 “El hombre en la encrucijada” es el título del curso universitario sobre dilemas éticos que se celebra del 16 al 18 de diciembre en la facultad de Medicina. Joaquín Fernández-Crehuet, catedrático de medicina, nos explica el porqué de estas jornadas. El departamento de Psicología Básica y el de Medicina Preventiva y Salud Pública de la UMA organizan este curso, que cuenta con dos créditos de libre configuración para los universitarios y al que pueden acudir también profesores de religión o cualquier otro interesado. -¿Qué sentido tienen estas jornadas? - El sentido de estas jornadas, que ya son las cuartas, es tratar de abrir un foro entre los alumnos del pre y post grado y de todos aquellos interesados, sobre la vida en general y el respeto que la persona merece desde su concepción hasta el final de su vida, en razón a la dignidad inviolable que toda persona tiene por el hecho de ser persona. Con ello queremos abordar un planteamiento amplio desde la medicina, la biología, la psicología, la enfermería o la antropología, para tener una idea multidisciplinar que nos va a enriquecer a todos, alumnos y profesores. -¿Cubre este curso un aspecto que no cubren los estudios reglados de cada disciplina? - La idea es esa, al menos desde el departamento de Medicina Preventiva: cubrir una deficiencia, porque la ética médica se trata en la carrera en un tiempo insuficiente. Es por tanto un complemento muy apropiado porque nos permite analizar esta encrucijada y abordarla desde otra perspectiva que no da tiempo. Lo mismo ocurre en otras disciplinas, que no terminan de implementar una asignatura reglada como es ésta. -¿Cómo responden los alumnos y los profesores? - Ha ido progresivamente en aumento, desde las primeras con asistencia más escasa, hasta este cuarto curso en que detectamos mayor interés, también porque hay dos créditos de libre configuración otorgados por la propia UMA, y también porque cada año hemos intentado superarnos y ampliar el abanico de profesores y colaboradores. El boca a boca de cursos anteriores ha sido la mejor propaganda para que el curso se presente como muy atractivo. - En el campo de la Salud, ¿cuáles son los principales precipicios a los que se asoma la ética en este momento? - El principal es olvidar la categoría que tiene la persona, el deterioro que con frecuencia el relativismo está originando en el concepto de la dignidad de la persona, que está en muchos casos desgraciadamente pasando de ser un valor absoluto e inmutable a un valor relativo, donde la dignidad empieza a cuestionarse, por ejemplo, cuando el enfermo pierde calidad de vida. Nuestro punto de vista es que la calidad de vida no afecta en absoluto a la dignidad de la persona, porque esa dignidad nada ni nadie puede quitársela, porque constituye el fundamento de la igualdad de todos los seres humanos y el abordaje con que cualquier médico debe empezar a ver a sus pacientes. Todo lo que no sea respetar ese valor intrínseco de la persona es una tentación y un precipicio donde puede caer la medicina si el relativismo no se detiene al considerar que hay cosas que no se relativizan nunca, que esa dignidad merece siempre un respeto ilimitado, elevado a la máxima categoría, el amor, el querer el bien de las personas sin pedirles nada a cambio, ese amor recio de la idea aristotélica. La medicina debe tener una raíz antropológica muy fundada y no sucumbir al relativismo imperante donde cada uno pone el valor a las personas que le parezca a ella. Si entramos en esa dinámica, la medicina pasará a ser algo tremendamente injusto.