DiócesisHomilías Mons. Dorado

Virgen del Rosario (Cádiz)

Publicado: 00/00/1987: 1237

Virgen del Rosario

Cádiz: 1987

Queridos hermanos:


1.- Nos hemos reunido aquí en torno a la figura bendita de la Virgen en este título tan universal y tan gaditano del ROSARIO.

Yo quisiera poner delante de vosotros una reflexión sencilla, centrada en el Misterio de la Iglesia y el Misterio de María.


2.- La época actual que nos toca vivir, es una época hermosa y esperanzadora para la Iglesia. La Iglesia, extendida por todo el universo, es bandera de paz y de reconciliación entre los hombres. La Iglesia quizá, en ningún tiempo, pese a sus errores y pecados de nuestra época contemporánea, en ningún tiempo ha tenido tanto prestigio mundial como tiene hoy. La Iglesia, que gracias a Dios ha perdido “poder político”, siendo, como María, la Virgen fiel.


3.- Quisiera terminar con unas palabras de aliento en nuestro amor a la Iglesia, en nuestro amor a nuestra Iglesia concreta de Cádiz y Ceuta:

Amad entrañablemente la Iglesia que os vio nacer, a la que debéis todo. Amad a esta Iglesia con su rica tradición. Iglesia de Ceuta, que no eres de ayer, que eres Iglesia de siglos, que tienes raíces seculares y que estás extendida entre tanta gente sencilla y tanta gente buena.

Iglesia de Cádiz y Ceuta, sé como Santa María del Rosario, Virgen Madre.

Esa es la expresión auténtica de tu verdadera devoción a tu querida patrona.

Preguntado R. Bart en una ocasión sobre el mayor obstáculo para la unión entre los cristianos católicos y los cristianos protestantes, respondió: ¿El mayor obstáculo? Pues bien, se podría decir que es una pequeña palabra que la Iglesia Católica añade detrás de cada una de nuestras proposiciones. Cuando nosotros decimos “Jesús”, los católicos añaden: “Jesús y María”.


+ Antonio Dorado Soto,
Obispo de Cádiz y Ceuta

Diócesis Málaga

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