NoticiaD. Antonio Dorado, obispo de Málaga (1993-2008)

Obispo de Cádiz y Ceuta: «La Iglesia le debe mucho»

Publicado: 17/03/2015: 9681

Declaraciones del obispo de Cádiz y Ceuta, Mons. D. Rafael Zornoza Boy, ante el fallecimiento de Mons. D. Antonio Dorado Soto, obispo de esta Diócesis entre 1973 y 1993.

D. Antonio Dorado Soto fue 20 años obispo de Cádiz Y Ceuta. Se le recuerda con muchísimo cariño en la diócesis. Era muy querido por todos. Tenía fama de ser un hombre muy cercano e inteligente. 

Hizo una grandísima labor, porque a él le tocó recibir los primeros frutos del Concilio Vaticano II y la visión nueva de la Iglesia que se presentaba en los documentos y que había que llevarlo a la práctica en normas diocesanas, directorios. Puso en marcha el primer consejo presbiteral, de los arciprestazgos con sus arciprestes, consejos laicales. Se dedicó mucho al mundo del laicado.

Comenzó las semanas de la familia que duran todavía repartidas por toda la diócesis. Hizo los primeros delegados laicos, se le recuerda mucho porque inició una gran asamblea diocesana, del que salió un consejo pastoral que fue el primero o segundo de España.

De acuerdo con los obispos de Andalucía llevó el Seminario a Sevilla, acercándolo desde Salamanca. Revitalizó la vida de las parroquias a las que visitó constantemente y de hecho editó después unas cartas pastorales que recogían toda su enseñanza. Estuvo muy preocupado por lo social en una época difícil para Cádiz y me parece muy importante a nivel nacional, puesto que marca su personalidad y valía, que fue presidente de Apostolado Seglar y también presidente de la Comisión del Clero de la CEE.

Precisamente bajo su mandato en esta comisión del Clero se hicieron dos congresos de espiritualidad que marcaron la vida de España y de los sacerdotes. Un simposio en el 87 y un congreso en 1989 que fue la preparación inmediata del sínodo sobre la formación de los sacerdotes de la que emanó la Pastores dabo vobis.

Él estuvo presente en dos sínodos de la Iglesia el primero el del año 1974, que fue el año de la Evangelización y del que emanó después la famosa Evangelii Nuntiandii y estuvo en el sínodo del apostolado seglar del que salió el documento básico sobre los fieles cristianos Vocación Y Misión En La Iglesia. Por tanto un hombre con una riquísima personalidad, de ciencia, de una cercanía pastoral que verdaderamente se recordará mucho tiempo y al que la Iglesia le debe tanto y eso los gaditanos lo saben, le quieren mucho y ahora sienten su pérdida.

+ Rafael Zornoza Boy, obispo de Cádiz y Ceuta

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