NoticiaColaboración Vivir es poseerse Publicado: 27/05/2014: 12401 Micro-relato de Lorenzo Orellana Javier Zubiri decía que “vivir es poseerse”. Al leer esta afirmación me pregunté: y ¿cómo se poseía Jesús? Las palabras que abren y cierran el Evangelio de san Lucas creo que nos lo indican Javier Zubiri decía que “vivir es poseerse”. Al leer esta afirmación me pregunté: y ¿cómo se poseía Jesús? Las palabras que abren y cierran el Evangelio de san Lucas creo que nos lo indican: “¿No sabíais que yo debo estar en las cosas de mi Padre?”, primera afirmación. Y la última: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”. La vida de Jesús está enmarcada por el amor y voluntad del Padre. De ahí mana su hondón. ¿De dónde mana el nuestro? ¿De dónde nuestra fe? Benedicto XVI, tras inaugurar el Año de la fe, el 11 de octubre de 1012, explicó lo que significa decir yo creo: “Cuando decimos creo en Dios, decimos como Abrahán: yo confío en ti, Señor, pero no como en alguien a quien recurrir sólo en los momentos de dificultad o a quien dedicar algún momento del día o de la semana". Decir creo en Dios significa fundamentar en él mi vida, dejar que su Palabra la oriente cada día, en las opciones concretas, sin temor a perder algo de sí mismo. Fundamentar el él la vida de cada día. Quien pierda su vida por mí, la salvará, dijo Jesús.