Carta Pastoral del Obispo de Málaga
Día de la Misión Diocesana

"Evangelizar es la vocación de la Iglesia y, por tanto, de nuestra Diócesis. Este gran objetivo es el que unifica y organiza los demás objetivos parciales de nuestra Iglesia Diocesana". Son palabras de nuestro Proyecto Pastoral Diocesano (pág. 24), que tienen una resonancia especial cuando estamos celebrando la Pascua. Recreados y sostenidos por la fe, tenemos que decir a nuestros hermanos que en Jesucristo muerto y resucitado hay vida y futuro para el hombre. De El brota un dinamismo que nos pone en pie cada mañana, para anunciar que no estamos dejados de la mano de Dios. Jesucristo ha vencido el pecado y la muerte y, apoyados en El, podemos proclamar que el Reino de Dios está entre nosotros y trata de abrirse camino. Vemos que la violencia, la injusticia y la desesperanza parecen haberse enseñoreado de nuestra tierra, pero El ha vencido las fuerzas que crucifican y destruyen, y por eso podemos seguir buscando la paz y la justicia y apostando por la vida, mientras caminamos hacia Dios.

Algunos hermanos nuestros dejaron todo para ir a proclamar este Evangelio en Venezuela, en la regíón de Caicara del Orinoco. Aquella Iglesia hermana es fiel retrato de lo que nos dice el Concilio, cuando afirma que algunas Iglesias "localizadas la mayor parte de la las veces en las zonas más pobres del mundo, sufren todavía una gravísima penuria de sacerdotes y escasez de recursos materiales" y necesitan que otras comunidades cristianas les suministren toda clase de ayuda (AG 19).

Muy sensible a su vocación evangelizadora, la Diócesis de Málaga adquirió, hace ya diez años, el compromiso de mantener una ayuda permanente a la Archidiócesis de Ciudad Bolívar. Dicha ayuda se traduce en la presencia allí de algunos sacerdotes, y a veces también seglares, y en los medios económicos necesarios. En su última reunión, el Consejo del Presbiterio ha visto la conveniencia de que se renueve dicho compromiso, que había caducado en el mes de Septiembre. Se trata de un compromiso de toda la Iglesia Diocesana, que asumimos con honda alegría, conscientes de que nos corresponde a todos sostenerle.

Para ello, cada año celebramos el Día de la Misión Diocesana, que este año será el domingo V de Pascua, 27 de Abril. Por una parte, se trata de mantener viva nuestra conciencia misionera. Y por otra, de ejercitar nuestra responsabilidad. Algunos ponen en práctica su apoyo ofreciendo unos años de su vida, como es el caso de los sacerdotes malagueños que ejercen allí su ministerio; otros, con su constante oración y sus signos de solidaridad hacia estos hermanos. No sois pocos quienes tenéis la posibilidad de ofrecer vuestra ayuda económica para sostener esta obra tan hermosa. Como dice el cartel que se ha confeccionado para esta ocasión, la Misión Diocesana es "UN DON Y UNA TAREA". Es UN DON, un regalo de Dios para todos nosotros; y al mismo tiempo, UNA TAREA, pues nos corresponde a todos sostener a nuestros a misioneros y dotarles de los medios necesarios. No olvidéis que es dando como se recibe y que también la aportación económica, para sostener a nuestra Misión Diocesana, es una forma de trabajar por la causa del Evangelio.

+ Antonio Dorado,

Obispo de Málaga.