DiócesisCartas Pastorales Mons. Dorado

La contribución de nuestros mayores

Publicado: 20/07/2008: 802

Carta de Mons. Dorado Soto con motivo de la festividad de San Joaquín y Santa Ana, “Día de los Abuelos”


Una tradición antigua asegura que los Padres de María fueron San Joaquín y Santa Ana, aunque los escritos del Nuevo Testamento no dicen nada sobre ellos ni dónde nació y se crió Nuestra Señora. Por tal motivo, algunos cristianos, entre ellos San Pedro Damián, afeaban a quienes celebraban su fiesta. A pesar de todo, los cristianos de Oriente edificaron ya en el s. IV una iglesia en el mismo lugar que se consideraba la casa de San Joaquín y de Santa Ana, pero la fiesta de ambos no se celebraba el mismo día. La reforma de la Liturgia posterior al concilio Vaticano II estableció que la festividad de los esposos San Joaquín y Santa Ana se celebrara el 26 de Julio.

En fechas recientes, el padre Ángel García, fundador de la Asociación Mensajeros de la Paz, propuso que se celebre en esta fecha el Día de los Abuelos, una iniciativa que puede ayudarnos a reflexionar sobre diversos aspectos de la vida de nuestros mayores: el trato que reciben en la sociedad del siglo XXI, la falta de residencias bien equipadas que les permitan vivir con dignidad sus últimos años, el desarrollo insuficiente de la medicina gerontológica, la necesidad de más especialistas, la soledad en que frecuentemente los dejamos, los malos tratos que reciben incluso de sus seres más queridos… Son cuestiones de las que se habla muy poco, aunque están al cabo de la calle. Por mi parte, deseo centrar hoy mi atención en tres aspectos.

El primero, manifestar mi gratitud a nuestros mayores y apoyar su contribución a la sociedad y a la Iglesia. Aparte de la ayuda generosa que prestan a sus hijos cuidando a los nietos, deseo constatar que muchas obras caritativas y sociales se sostienen en gran medida por su colaboración económica, y por su participación voluntaria en el buen desarrollo de sus actividades. Porque los jubilados disponen de tiempo y sabiduría acumulada en largos años de intenso trabajo. Gracias a esta actividad, se sienten útiles y contentos de aportar su ayuda y sus conocimientos, sin quitar a nadie un empleo; y además, dicho quehacer llena su vida, pues les permite seguir cultivando sus cualidades y, de paso, encontrar nuevos amigos con los que relacionarse. 

El segundo aspecto sobre el que deseo llamar la atención de los sacerdotes y de las comunidades parroquiales es el de la práctica de su fe, especialmente en lo que se refiere a la Eucaristía. Mientras pueden, los que son creyentes acuden habitualmente al templo, hasta el día en que les faltan las fuerzas para moverse con autonomía. En algunos casos, los hijos los llevan a la iglesia mientras pueden; o solicitan a la comunidad parroquial que les lleven a casa la sagrada comunión, complemento natural de la misa que escuchan en la radio o ven en la televisión. Pero no siempre los familiares son sensibles a la fe de sus mayores y se da el caso de que personas profundamente creyentes no puedan disfrutar de la Eucaristía cuando más necesitan la ayuda divina y la cercanía de la Iglesia.

El tercero, es recordar la enseñanza de la Iglesia sobre su derecho a disponer de los cuidados paliativos oportunos y a no someterse a prácticas de encarnizamiento terapéutico. Como es natural, aunque se puede eliminar en notable medida el dolor físico, no es posible ahorrarles todo tipo de sufrimiento, por ser algo connatural a la persona. Por supuesto, no queremos que sufran, pero el sufrimiento no es totalmente negativo, e incluso nos puede servir de ocasión para que humanicemos los últimos años de la vida. En ningún caso es legítimo provocar su muerte o acelerarla mediante cualquier tipo de prácticas médicas, por más que se las disfrace de una falsa piedad, porque la vida se la ha dado Dios y nadie tiene derecho a quitársela a nadie. Lo que sí debemos procurar es que se sientan rodeados de cariño, comprendidos y cuidados con la mayor delicadeza.

+ Antonio Dorado Soto,
Obispo de Málaga

Diócesis Málaga

@DiocesisMalaga
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