Este pequeño pueblo del Valle del Genal, rodeado de alcornoques, castaños, madroños, brezos, lentiscos y helechos, sorprende por el cuidado y el esmero con el que los vecinos conservan sus calles, llenas de plantas.

En el centro del casco urbano se encuentra la Iglesia de Ntra. Sra. de la Encarnación, obra del siglo XVIII y estilo barroco clasicista, aunque posteriormente reconstruida en el siglo XIX.  Este templo de planta basilical, consta de tres naves separadas por pilares con forma cuadrangular. Llama la atención la cúpula que cubre el altar mayor, por su profusa decoración con yeserías policromadas en la que están representados los cuatro evangelistas y escenas como el Martirio de San Sebastián y la Anunciación, entre otras. En el interior del templo destacan las imágenes de san Miguel y san Sebastián, patronos de la localidad.

Ya en el exterior, se puede ver en la fachada principal una hornacina con la imagen de la Virgen con el niño, pero sobre todo destaca su torre campanario cuadrada que finaliza en una cúpula semiesférica revestida de cerámica vidriada de color azul.

La parte más antigua de Benarrabá se encuentra en torno a la iglesia, en la que se conservan restos de época medieval, así como algunas fachadas del siglo XVIII en las calles Saucal, Baja, Estación y Sol. Fachadas que contrastan con el blanco de la mayoría de las casas del pueblo, ya que presentan ricos y coloridos murales llenos de detalles, como se puede ver en la denominada Casa Lola.

Esta localidad cuenta también con la ermita de Santo Cristo de la Vera Cruz, un templo de una sola nave, construido en el siglo XVII, aunque reformado con posterioridad y situado en la Plaza de la Veracruz.

El párroco de Benarrabá, Miguel Ángel Merced, afirma que merece la pena visitar «este rincón del Valle del Genal para vivir una gran experiencia y disfrutar de los tesoros del pueblo, principalmente, la acogida de su gente».

Benarrabá en la Diputación de Málaga

Ayuntamiento de Benarrabá