NoticiaEn los Medios Vida humana Publicado: 08/02/2021: 13242 EL ALFÉIZAR. DIARIO SUR En España en 2019 se practicaron 99.149 abortos voluntarios. Desde 2010 se suma un total de 1.025.055 abortos. Estamos en febrero de 2021 y aún no ha publicado el Ministerio de Sanidad los datos relativos al año pasado, por tanto, estaremos ante una cifra superior. Superamos con creces la cifra del millón de abortos en la última década en España. Al subir a Twitter esta cifra alguien me respondió: «Qué pena más grande. Cuántos inocentes sacrificados». Y hubo quien respondió: «Qué buenas noticias que un millón de mujeres no hayan tenido que tener un hijo no deseado o arriesgar su vida para no tenerlo». Tanto la doctrina cristiana como la hebrea o musulmana defienden que la vida humana sea protegida desde el primer momento de la concepción. También la ética de millares de científicos. Las legislaciones varían de un país a otro. Me pregunto si vamos en la dirección adecuada o si la interrupción voluntaria del embarazo es una realidad endémica, instalada en España, que obvia cuestionarnos los motivos o respuestas. ¿No hay otras soluciones para evitar los más de noventa mil abortos al año en España? En comparación con otros animales, los humanos nacen prematuramente cuando muchos de sus sistemas vitales aún están subdesarrollados. De hecho, abandonemos a un recién nacido y morirá; no tiene capacidad para sobrevivir por sí solo. De esta incapacidad para sobrevivir hasta bien entrados muchos meses fuera del útero materno surgen preguntas: conociendo las razones y motivos ¿podríamos haber puesto la fecha de corte unos meses más adelante para abortar legalmente? ¿Podríamos contemplar otras medidas para salvar la vida engendrada? Estas y otras preguntas, como ¿qué aborta una mujer?, surgen al analizar la interrupción voluntaria del embarazo. En este tema, por cierto, la legislación española es algo que nos hemos otorgado, a mi juicio, equivocadamente: se ofrece como derecho la posibilidad de interrumpir la vida humana más débil; algo que, por otra parte, es un mal intrínseco y que entiendo nadie desea.