NoticiaMigraciones Mohamed Ndoye: «Cuatro personas murieron en la patera en la que viajaba» Publicado: 21/09/2023: 18844 Migración Mohamed Ndoye llegó a España en patera desde Senegal. Nueve días de viaje en los que se agotaron la comida y el agua. Eran 43 en la embarcación. Sólo tocaron tierra 39. “Llegué gracias a Dios”, confiesa. Ahora vive en Málaga. Conoce su historia por la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado. Mohamed llegó a España tras un viaje en patera de 9 días. De los 43 que venían a bordo, solo llegaron 39. Asegura que está vivo "gracias a Dios". La suya es una de las historias que habitan en la Casa Betania. Esta es una casa de acogida para refugiados solicitantes de protección internacional, situada junto al Colegio de las Esclavas de Málaga, que la Fundación La Merced Migraciones abrió en enero de 2023 y que lleva adelante junto con la Congregación de las Esclavas del Divino Corazón. «Aquí me siento querido por todos, compañeros y educadores», cuenta Mohamed, que llegó a la casa el 21 de febrero de 2023. «Esta casa es sublime, más que “muy bien”. Aquí cocinamos, hacemos tareas de limpieza y nos enseñan a ser autónomos», explica «Cada uno tiene su habitación, tengo mi espacio para hacer mis cosas y nos dan oportunidades». En Casa Betania ayudan a estos jóvenes en el marco de una “Misión compartida”, preparándoles en su itinerario de inserción socio laboral con aprendizaje del español, formación e inserción laboral; búsqueda de atención sanitaria específica para algún caso, talleres de habilidades sociales, dinámicas de grupo y participación en foros en distintos foros de la ciudad de Málaga. Con casas como ésta, la Orden de La Merced (Mercedarios) lleva desde el año 1987 trabajando en la acogida e integración de migrantes y refugiados. Acogen a casi 140 personas al año. En su momento, la Fundación La Merced Migraciones fue la primera entidad en España en trabajar con menores no acompañados. En la actualidad los chicos y chicas (de entre 18 y 25 años) que residen en estos hogares cuentan, además, con atención psicológica, acompañamiento jurídico, enseñanza del idioma, formación y ayuda para la inserción laboral. ¿Por qué migró? La historia de Mohamed deja clara la existencia de fuertes condicionantes a la hora de decidir dejar tu propio país. En Senegal, 1 de cada 5 personas se encuentra con algún grado de desnutrición. La esperanza de vida es de solo 54 años para los hombres y de 57 años para las mujeres, muy por debajo del promedio mundial, como recoge La Merced Migraciones en su estudio sobre las causas de la migración. Mohamed lo experimentó en su propia carne. Con 24 años, es el mayor de seis hermanos, nacido y criado en Guet Ndar, en la ciudad de Saint Louis. «Es un barrio obrero, con gente muy trabajadora que se busca la vida. Empecé a estudiar con 6 años y terminé con 12, cuando empecé a trabajar en el mar con mi tío. Mi padre quería que estudiara, pero la situación de mi familia lo hacía imposible. En mi ciudad, la mayoría solo saben trabajar en el mar, pero ya no quedan peces porque el gobierno vende nuestra zona de pesca a otros países. Se trabaja muy duro y se gana muy poco dinero. Nunca se descansa, solo se vive para trabajar. Decidí marcharme porque la vida allí es muy dura. España está cerca de Senegal y la experiencia de otros me hizo decidirme». El 4 de julio de 2022, Mohamed llegó a España tras un viaje en patera de 9 días. Su relato es crudo, aunque lo narra con asombrosa naturalidad: «Éramos 43 personas. Sólo llegamos 39. El día que salimos, el mar estaba tranquilo, pero por la noche empezó a hacer mucho viento. A los 7 días se terminaron la comida y el agua. Bebíamos agua del mar. En nuestra patera solo íbamos hombres de Senegal. Cuando el tiempo empeoraba, echábamos el ancla y parábamos durante horas. Había que tener cuidado con los barcos grandes que pasaban. Al noveno día, llegamos de noche cerca de Canarias, a unos 25 km., pero el motor dejó de funcionar. Un barco de salvamento nos recogió y nos llevó hasta la costa. En el puerto nos recibió Cruz Roja. Nos dieron ropa, mantas y comida. Después fuimos trasladados a la policía y de ahí hasta un centro llamado Canarias 50. Después de un mes y medio, a primeros de septiembre, fui a un centro de Cruz Roja en Málaga, y de ahí, llego a Casa Betania». Este joven senegalés está formándose para trabajar. «Aquí en España, para trabajar, necesitas formación. Eso me gusta y es lo que estoy haciendo. Hasta ahora he hecho el curso de marinero pescador, y estoy inscrito para hacer formación básica y tener mi título de marinero para salir al mar. También he hecho el curso de mozo de almacén y carretilla elevadora. Actualmente estoy estudiando español e inglés en CEPER Bahía Capuchinos. Me gustaría tener un buen futuro, tener una casa, formar una familia, poder vivir con mis padres y mis hermanos. Llevar a mi familia a la MECA. Me encantaría ayudar a la gente de mi país. Quiero trabajar en el mar, pero me adaptaría bien a cualquier trabajo. Ahora quiero formarme y estudiar mucho, para tener un buen trabajo». Mohamed ve a Dios detrás de la suerte que le ha permitido estar aquí. Su fe es un pilar en su vida. «Aquí se respeta mi religión, en la casa tengo mi espacio para hacer mis rezos. Soy musulmán y me gusta aprender el Corán y actualmente asisto a la escuela coránica de Fuengirola llamada La casa de Serigne Touba».