NoticiaEntrevistas Cristina Vera: «Acción Católica es una propuesta para todos los cristianos laicos de nuestras comunidades parroquiales» Cristina Vera y su esposo, Salvador González Publicado: 27/10/2017: 25703 Cristina Vera Ruiz-Herrera (Puerto de Santa María, Cádiz, 1971) es la nueva presidenta de la Acción Católica General (ACG) de Málaga. Trabajadora social de profesión, madre de dos hijos, está casada con Salvador González, quien también forma parte de la Comisión Permanente de la ACG y es el responsable de la Coordinadora de Infancia. Para la nueva presidenta, «el reto de los seglares es afianzar y renovar cada día el encuentro con el Señor, dejándonos transformar por la oración y salir a la calle para conocer la realidad que nos rodea». ¿Cómo recibió el nombramiento? Tanto yo como la Comisión Permanente de ACG lo hemos recibido con mucha ilusión y con gran entusiasmo. Personalmente además, lo estoy viviendo con un sentimiento de agradecimiento a Dios, a nuestro Obispo y a la Iglesia por la confianza que se deposita en mi persona. Acción Católica no es un movimiento, ¿qué es? Efectivamente, no es un movimiento. Es un proyecto y una herramienta que la Iglesia se da a sí misma para la vida laical. En concreto, podríamos decir, es una propuesta para todos los cristianos laicos de nuestras comunidades parroquiales que habitualmente viven su fe en nuestras parroquias y en la Diócesis. En este sentido, la Acción Católica General está llamada a ser una herramienta básica que cohesione al laicado de las iglesias locales. Por tanto, si responde a su genuina vocación, debe hacerse presente de manera natural en las parroquias. En otro nivel de pertenencia, la ACG es una asociación laical que nace con vocación de ayudar en la misión de anunciar a Jesucristo a todas las personas, de colaborar en la maduración de la fe cristiana de aquellos que dan sus primeros pasos en la Iglesia, de establecer en todas las parroquias una propuesta estable de apostolado asociado para que la acción evangelizadora de los laicos sea más eficaz y se realice en un clima de comunión y celo apostólico. En este nivel se necesitan laicos dispuestos a colaborar con el asociacionismo para el servicio de todos y a todos, para que este proyecto se pueda llevar adelante. Este sábado se está viviendo un Encuentro Interparroquial de Acción Católica General, ¿cuál es el objetivo de este encuentro? El III Encuentro Interparroquial que celebramos bajo el Lema de “Salir, sembrar y caminar en Iglesia” tiene varios objetivos. En primer lugar, comenzar el curso pastoral todos los sacerdotes y laicos de las parroquias para mostrar la comunión en un encuentro donde podamos, junto a nuestro obispo D. Jesús, visibilizar la necesidad de conocer y profundizar en el Proyecto de ACG, abiertos a lo que el Espíritu nos pueda suscitar. Además de tener un espacio donde orar y formarnos, con el deseo de encontrarnos con Cristo todos, independientemente de la realidad parroquial de la que procedemos. Por otro lado, desde la Comisión de Madrid, el equipo de ACG, el Presidente Antonio Muñoz y el Consiliario Manuel Verdú vienen para presentar y explicar qué es y en qué consiste el Proyecto de ACG que se está llevando a cabo en toda España. ¿Cuál será su cometido como presidenta? Hasta el mismo día del nombramiento, hemos venido realizando tareas y servicios, junto con otros muchos laicos de parroquias, y acompañados de nuestros párrocos, se va caminando hacia la coordinación de las parroquias. Nuestro objetivo es poder conocer la realidad que cada parroquia vive para así poder ayudarnos y avanzar más y mejor en la tarea evangelizadora. Mi proyecto como Presidenta pretende seguir fomentando las acciones orientadas hacia la revitalización de la vida parroquial, realizando actividades conjuntas para niños, jóvenes y adultos, donde el objetivo principal es vivir en comunión la alegría del Evangelio. Se necesita en el hoy de la Diócesis crear procesos formativos estables para todos los laicos que quieran vivir su fe, mediante procesos maduros y conscientes, cuyo punto de arranque sea la etapa infantil hasta la adultez. Todo esto para impulsar una transformación evangelizadora y misionera. Desde la Comisión Permanente de ACG pretendemos contribuir a la unidad y al apoyo de las comunidades parroquiales para su crecimiento y madurez en la fe, cuyo fruto sea una parroquia viva. Por otra parte, es necesario impulsar que la Iglesia de Málaga se sitúe en actitud de salida y de este modo pueda dar una respuesta adecuada a la realidad que estamos viviendo, especialmente atendiendo a quienes más nos necesitan. Otro cometido que debemos afrontar es la presentación y difusión del Proyecto de ACG que aún no es conocido en muchos ámbitos de nuestra Iglesia particular, y llegar así a todos los rincones de la Diócesis. ¿Cuál es el reto más importante que tiene la Acción Católica General en Málaga? En la Iglesia, todos estamos llamados a la plenitud de la vida cristiana. Los niños, jóvenes y adultos tenemos la necesidad de descubrir nuestra vocacional laical que nace del bautismo. Para ser miembros vivos y activos en la Iglesia y evangelizadores comprometidos con la realidad que vivimos. La Acción Católica nace y vive en la Iglesia, al servicio de su misión apostólica; por tanto, nuestro reto es lograr fortalecer la vida de las parroquias, por medio de esta herramienta para anunciar a Cristo a todos y en todas las realidades en las que estamos inmersos como cristianos laicos. Todo esto no será posible sin hacer un esfuerzo importante en la formación del laicado adulto que nos ayude a la transformación de las realidades temporales. En Málaga se creó hace algún tiempo una Comisión Interparroquial que coordina los tres niveles de trabajo: infancia, jóvenes y adultos. Necesitamos consolidar este trabajo y difundirlo por toda la Diócesis con el deseo de sumar. Cada coordinadora trabaja durante el año con el deseo de servir en esta nueva etapa a quienes quieran ir sumándose a este proyecto. Se trata de una nueva etapa que afrontamos con ilusión, esperanza y confianza en el Señor. ¿Y el reto que tenemos los seglares, los cristianos en Málaga? A mi modo de ver el reto de los seglares es afianzar y renovar cada día el encuentro con el Señor, dejándonos transformar por la oración; y, salir a la calle para conocer la realidad que nos rodea. Urge formarnos para ser cristianos maduros, discípulos misioneros para llegar a los que más necesitan conocer a Jesús. Y potenciar que cada seglar tenga un grupo, equipo o comunidad de vida que nos ayude a vivir nuestra vocación, sabiendo que no estamos solo, que caminamos con más seglares de otras parroquias.