Noticia SÁNCHEZ LUQUE. Carta abierta en tiempo pascual Publicado: 02/05/2020: 13105 Breves pinceladas sobre el pasaje de los discípulos de Emaús. Reflexiones en un día de confinamiento. José Sánchez Luque. Sacerdote diocesano Aquellos dos buenos discípulos (Cleofás y quizá su esposa, dicen al respecto las teólogas feminista) iban aburridos, pero volvieron entusiasmados. A pesar de las piedras del camino y de la oscuridad de la noche, iban gozosos y quizá hasta cantando, de vuelta a Jerusalén. ¿Recordarían el aleluya que cantaban en el templo? El corazón les ardía. Pasaron del aburrimiento al entusiasmo. Hoy a muchos cristianos, y quizá a algún que otro cura, nos pasa lo contrario: entramos en la Misa aburridos y salimos aburridos. No nos hemos encontrado con el Crucificado-resucitado. Nuestro corazón estaba frío y sigue frío. Aquellos dos buenos discípulos sabían muy bien lo que había pasado. Ellos creían -incluso más que nosotros hoy- que Jesús sería el libertador de Israel. Lucas resume en esta frase todo su Evangelio, que bien podría titularse: “Historia y mensaje de Jesucristo, el libertador.” Ya el ángel le dice a María que al niño le llame Jesús porque salvará o liberará a su pueblo del pecado: la injustica y la muerte. Y María lo aprendió bien. Ya en el Magníficat nos dice que aquel niño seguirá el camino del que derriba de sus tronos a los poderosos y enaltece a los humildes. El que viene también a colmar de bienes a los hambrientos y a despedir vacíos a los ricos. ¡Qué sin sentido! Nosotros seguimos llenándola de joyas y de coronas, con apariencia de rica. Y su tío Zacarías intuye también, cuando canta entusiasmado, que el niño (el sol que nace de lo alto) viene a iluminar a los que viven en tinieblas y sombra de muerte y a guiarnos por el camino de la paz y la justicia. El Lunes Santo en la Misa de santa Marta el papa estuvo genial. Habló de la preocupación por el pobre sociológico y por su liberación, buscando caminos eficaces contra las leyes del mercado que nos domina. Y en contra de los corruptos que les roban. Y al final dijo algo importante: “No me digáis que esto es comunismo, no, esto es la centralidad del Evangelio”. ¡Da que pensar! Y cuando van aquella mañana, llenos de alegría, al templo para ofrecerlo al Señor, hasta la beata Ana de más de 84 años hablaba del niño a los que esperaban la liberación de Israel. Y no digamos el anuncio del ángel a los pastores que cantamos en todas las Misas con gloria: solamente habrá gloria en el cielo cuando haya paz entre los hombres. La gloria de Dios es que el hombre viva con dignidad (Ireneo). San Romero de América tradujo al siglo XX la frase de su colega lugdunense: la gloria de Dios consiste en que el pobre viva. (Gloria Dei, pauper vivens). Y llegamos al texto fundamental: un texto que es crucial en el Evangelio de Lucas. Por eso la Iglesia, sabia y maestra, nos lo pone todos los años (toque el ciclo que toque) en la misa crismal. Porque fue el programa de Jesús y debe ser el programa de todo obispo, cura y cristiano. A este respecto recuerdo unas palabras sabias del fundador de la HOAC, Guillermo Rovirosa: “Cuando se hace difícil avanzar, es fundamental profundizar en lo esencial”, ¡cuánta sabiduría! En Lc 4, 15- 21 Jesús nos propone lo esencial de su programa y del programa de todos sus discípulos. Pero qué trabajo nos cuesta asimilarlo y vivirlo personal y comunitariamente. Preferimos meter la luz debajo del celemín… Recordamos el pasaje: Jesús, en la sinagoga de su pueblo, abre el libro del profeta Isaías por el capítulo 61 y lee: “El espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para anunciar la buena noticia a los pobres; me ha enviado a proclamar la libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a liberar a los oprimidos y a proclamar el año de gracia del Señor…. Toda la sinagoga tenía los ojos clavados en él. Y comenzó a decir: Hoy se ha cumplido el pasaje que acabáis de escuchar." ¡Qué hermoso sería que en este tiempo de pandemia, con tantos y angustiosos problemas, cuando se levante el confinamiento, (aunque ya se podría avanzar el instrumentum laboris o un cuestionario que nos haga pensar) el obispo, seglares y curas de Málaga convocáramos varios encuentros de cara a buscar lo que el Señor nos pide en estos momentos! ¿Cómo podemos poner en práctica el mensaje liberador del Nazareno? ¿Qué llamadas nos hace el Señor a través de sus pobres? Se ha escrito mucho sobre el particular… Ayudemos a buscar caminos de liberación, unidos a tantos hermanos como se esfuerzan por ir construyendo una sociedad nueva desde la problemática actual y el Evangelio de Jesús. ¡Feliz Pascua!