¿Cómo ha vivido el proceso de creación del cartel de la Semana Santa de Málaga? ¿Se ha encomendado especialmente para hacerlo?

Me lo encargaron con poca antelación. En un primer momento no sabía cómo abordarlo, pero pronto tuve claro que iba a usar como primera referencia la imagen de María Santísima de la Esperanza, que cuando yo era chico era la Virgen que estaba siempre presente en mi casa, la Virgen de mis padres.

¿Cuál es el espíritu de la obra? ¿Qué ha querido transmitir?

Con la estampa, una image añeja de la Virgen de hace casi un siglo, he querido representar el centenario que está celebrando la Agrupación de Cofradías de Málaga. Es una foto que siempre me ha encantado, porque la Virgen está espléndida. Con eso he querido también reflejar este periodo que hemos tenido que vivir, aferrados a estampas, fotos de las imágenes o una pantalla de internet, pero lejos de las verdaderas imágenes.

¿Qué busca despertar en los malagueños?

Que lo hagan suyo. He representado dos prototipos de la ciudad: la imagen de la Virgen de la Esperanza, que creo que es en cierto modo la Virgen de todos, y una de las esquinas de Calle Larios, que creo que es la más malagueña y cofrade posible, una de las más bellas de Europa para mí.

¿Cuáles están siendo las primeras reacciones?

La acogida ha sido muy buena en general. Estoy recibiendo muchos mensajes de apoyo y felicitación, me estoy sintiendo muy querido.

¿Qué carteles han sido sus favoritos de los creados hasta ahora con motivo de la Semana Santa de Málaga?

Ha habido muchos buenísimos, casi todos los de principios del siglo XX me encantan. Me gusta mucho la obra de Luis Ramos Rosas y Aristo Téllez, y más modernos también los hay buenísimos, incluso los que se podrían catalogar como de arte contemporáneo.

¿Cuál es su momento preferido en Semana Santa en Málaga, aquel que no se pierde por nada del mundo?

Mis preferidos son los que suceden en torno a la entrada y salida de las cofradías a la Catedral, es un entorno magnífico y es por donde suelo moverme.