«Es de bien nacidos el ser agradecido» De este sentimiento nacemos los Antiguos Alumnos Salesianos. Somos agradecidos con la educación recibida, con la espiritualidad que se nos transmitió en las casas salesianas y con la formación académica que nos preparó para ser buenos cristianos y honrados ciudadanos. 

Nuestro movimiento es vasto, bien constituido y con una fuerte estructura que tiene su base en las asociaciones locales que, unidas por territorios constituyen una federación regional, las distintas federaciones se unen en confederaciones nacionales y éstas en la mundial con sede en Roma. Los antiguos alumnos, junto con el resto de la Familia Salesiana, de la que formamos parte, compartimos misión con los salesianos, haciendo de los jóvenes parte fundamental de nuestra vocación, viviendo el Evangelio bajo el carisma de Don Bosco y teniendo a María como auxilio y permanente ayuda en nuestra acción. 

En el caso concreto de Málaga, nuestra asociación local está radicada en el Colegio Salesiano. Es una de las asociaciones más longevas de España, fue constituida en el año 1910. Fue una gran alegría para todos los antiguos alumnos malagueños celebrar con alborozo nuestro centenario hace cinco años que tuvo como culmen la erección del monumento a Don Bosco, momento álgido de esta gozosa efeméride. 

La asociación de Málaga programa durante el curso numerosas actividades de carácter lúdico, deportivo, social y formativo. Es destacable la célebre fiesta de la unión que se organiza anualmente y se trata de un fin de semana de reencuentro entre todos los antiguos alumnos sin distinción de ningún tipo unidos por nuestro orgullo de sentirnos salesianos e hijos de Don Bosco.

La asociación de Málaga forma parte de la Federación Regional Sur, que corresponde a las zonas de Andalucía, Canarias y Badajoz, más de 9.000 antiguos alumnos asociados que compartimos origen, vivencia y sentimiento. La principal misión de la federación es animar la vida de sus locales, mantener el vínculo común entre ellas y hacer vivo el pensamiento de Don Bosco de que las fuerzas débiles, cuando se unen, se fortalecen.

Los antiguos alumnos nos sentimos orgullosos de serlo. Como hijos agradecidos siempre tendremos a nuestro Padre y Maestro San Juan Bosco como el modelo de vida a seguir, que nos protege y acompaña permanentemente, que nos dio a María Auxiliadora como faro de nuestro caminar y que nos enseñó que la Iglesia y la Eucaristía eran los pilares de nuestra vida de cristianos.

No hay mejor forma de concluir estas palabras que con la definición que el propio Don Bosco hizo de nosotros y que dirigió a sus primeros salesianos: «Nuestros antiguos alumnos son la corona triunfante de vuestro trabajo, dedicación y vocación plenamente realizada».

Diego Aragón Yuste, presidente regional