Bajo el título “Iglesia y Prisión. Juntos profundicemos en la fe”, expertos en el mundo de la cárcel expondrán sus experiencias de trabajo y acompañamiento de las personas privadas de libertad.

Las jornadas se desarrollarán en la Parroquia de la Asunción, situada en la Avda. Ortega y Gasset, nº2 y dará comienzo a las 8 de la tarde.

El primer día, los ponentes hablarán sobre la presencia cristiana en la prisión. El segundo día, el tema central será la realidad de la cárcel y el tercero, se presentarán distintas alternativas a la prisión y ejecución de sentencias. El Sr. Obispo, Don Antonio Dorado, será el encargado de presidir la clausura.

La Pastoral Penitenciaria, formada en Málaga por 80 voluntarios y 6 sacerdotes, tiene como principal objetivo cambiar las actitudes de los reclusos para reinsertarlos en la sociedad. La apuesta principal es la atención social y jurídica, tanto a los internos como a sus familiares, pero sin olvidar la prevención, tarea que desarrollan visitando colegios e institutos para que los propios reclusos compartan con los adolescentes su testimonio.

Pero lo material no lo es todo. Las personas que se encuentran en el centro penitenciario de Alhaurín de la Torre demandan también la atención espiritual que les permita ahondar más en el conocimiento de Jesucristo. Los voluntarios y miembros de la Pastoral Penitenciaria, organizados en grupos de cinco personas, trabajan este aspecto en cada módulo, facilitando a los internos acompañamiento espiritual, celebrando con ellos la Eucaristía y haciendo presente el amor de Dios, que no se olvida de ellos sino que se hace más fuerte en situaciones como las que viven. Debido a las múltiples nacionalidades presentes en el ámbito carcelario, esta pastoral se coordina con otras confesiones.

José Antonio Fernández, director del Secretariado Diocesano, nos cuenta que “la Eucaristia es algo que demandan siempre, así como atencion jurídica y atencion social para ellos y los parientes que han dejado fuera. Para ello tenemos en marcha un banco de alimentos, trabajamos con Cáritas para atender sus necesidades y facilitamos su rehabilitación cuando salen de la cárcel. Tratamos de llegar donde las administraciones no llegan”. La poblacion interna aumenta en casi 5.000 personas cada año en España, por lo cual este apostolado es, cada vez, más necesario. Estas jornadas están dirigidas a todos aquellos interesados en conocer más a fondo esta tarea. Además, para los que quieran dar un paso más, Pastoral Penitenciaria pondrá en breve en marcha un curso intensivo de tres meses para unirse a su voluntariado.