D. Jesús Catalá se dirigió a los casi 1.000 participantes en el encuentro con estas palabras: «Aunque no os comprendan, aunque os insulten, aunque os vituperen… no tengáis miedo. Porque tenemos la fuerza del Señor. ¡Queridos jóvenes, no tengáis miedo de seguir al Maestro!»

«¿Cuántas redes habéis dejado ya por el Señor? –continuó el prelado–. Una red puede ser un proyecto personal, una carrera, una renuncia a algo por otra persona, un tiempo dedicado a otro, una renuncia a un capricho. Levantad la mano los que hayáis renunciado al menos a una red. ¿Cuántos estarías dispuestos a renunciar a vuestro proyecto personal, si el Señor os llama a consagraros a él?. Vais a ser más felices, si renunciáis a vuestro proyecto personal y seguís al Señor que si os guardáis vuestra red; porque de ese modo no pescaréis nada. ¿Habéis entendido? El que quiera pescar con su red, se quedará sin pesca; pero el que sea capaz de fiarse del Señor, recogerá una pesca abundantísima».

El obispo de Málaga concluyó su homilía con una invitación a los asistentes a ponerse delante del Señor y a decirle: «Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad».

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