«La originalidad de esta obra está en que es una pieza italiana, concretamente procede del norte de Italia. Hunde sus raíces en los maestros del Renacimiento del s. XVI y de ahí sus influencias, sobre todo de Leonardo da Vinci, una obra manierista que destaca por la delicadeza de sus trazos, la postura de la Virgen y el juego que tienen los niños», explica el director de ArsMálaga Palacio Episcopal, el sacerdote Miguel Gamero.

Mujer de época

La escena representa una gruta o un paisaje casi en ruinas, con un obelisco al fondo, en referencia a
la antigüedad, y en este escenario se representa a la Virgen María ataviada como una mujer de la época y sostiene en una mano al Señor, representado como Cristo niño, que le tiende su mano tanto a su madre como a su primo Juan, que está sentado sobre un banco mientas María lo acaricia. «Entran en diálogo tanto san Juan como Jesús de bebés, haciendo referencia bíblica a esas dos historias paralelas, muy parecidas tanto el nacimiento de Jesús, como de Juan. Y cómo en un momento de sus vidas se unen en el bautismo. Evidentemente, esta escena transcurre después del encuentro entre la Virgen María y su prima santa Isabel, cuando se saludan embarazadas, posteriormente el nacimiento y tras él, esta escena de ternura, de cariño, que nos habla sobre todo de la Encarnación. Cristo se hace
hombre y, como un niño, juega con su primo Juan», comenta Miguel Gamero, comisario de esta exposición.

«En las paredes de esta sala hemos querido recordar la cita de la Misericordiae Vultus: “Dios no quiso dejar la humanidad en soledad y a merced del mal. Por esto pensó y quiso a María santa e inmaculada en el amor (cfr Ef 1,4), para que fuese la Madre del Redentor del hombre”. Esta frase da sentido a la sala, en la que esta tabla, junto a otras piezas de la muestra, representa la maternidad de María».

Ficha de la obra

Título: "Virgen con el Niño y san Juanito"
Autor: Anónimo italiano
Fecha: Siglo XVI
Materia: Óleo sobre tabla
Procedencia: Obispado de Málaga