NoticiaSocial Cáritas y Manos Unidas se unen para impulsar la campaña "Una sola familia humana. Alimentos para todos" Publicado: 04/01/2014: 4723 El Papa Francisco ha denunciado desde Roma el escándalo mundial que supone que casi mil millones de personas todavía sufran hambre hoy. Un escándalo ante el que señala, “no podemos mirar a otra parte”, porque “los alimentos que hay a disposición hoy en el mundo bastarían para quitar el hambre a todos”. En España, Cáritas Española y Manos Unidas van a desarrollar de manera conjunta una campaña para afrontar este problema. En un vídeo mensaje emitido a todo el mundo con motivo del lanzamiento de la campaña global impulsada por Cáritas Internationalis “Una Sola Familia Humana, Alimentos para Todos”, el Santo Padre invita “a todas las instituciones del mundo, a toda la Iglesia y a cada unos de nosotros mismos, como una sola familia humana, a dar voz a todas las personas que sufren silenciosamente el hambre, para que esta voz se convierta en un rugido capaz de sacudir al mundo”. Ante el drama del hambre, el Papa Francisco, tras explicar que “la parábola de la multiplicación de los panes y los peces no enseña precisamente eso: que cuando hay voluntad, lo que tenemos no se termina, incluso sobra y no se pierde”, nos exhorta a “compartir lo que tenemos, con caridad cristina, con todos aquellos que se ven obligados a hacer frente a numerosos obstáculos para poder satisfacer una necesidad tan primaria y, a la vez, seamos promotores de una auténtica cooperación con los pobres, para que a través de los frutos del trabajo de ellos y de nuestro trabajo podamos vivir una vida digna”. Con su apoyo a esta campaña, el Papa lanza también una “invitación a todos nosotros, para que seamos conscientes de la elección de nuestros alimentos, que con frecuencia significa desperdiciar la comida y usar mal los recursos a nuestra disposición. Es también una exhortación para que dejemos de pensar que nuestras acciones cotidianas no tienen repercusiones en la vida de quienes --cerca o lejos de nosotros-- sufren el hambre en su propia piel”. En Madrid, de forma simultánea al acto de lanzamiento celebrado en Roma, se ha presentado la campaña en un encuentro informativo celebrado en la Universidad Pontifica Comillas. En nuestro país, Cáritas Española y Manos Unidas van a desarrollar de manera conjunta esta campaña, como explicaron en la presentación los obispos responsables de ambas instituciones, monseñor Alfonso Milián y monseñor Juan José Omella, respectivamente. Junto a ellos, intervinieron en el acto, para explicar en detalle los objetivos y estrategias de esta campaña, la directora del Área de Cooperación Internacional de Cáritas, Natalia Peiró, y el coordinador del departamento de Campañas de Manos Unidas, Marcos Gordillo. Como aseguró monseñor Milián en la presentación, “esta campaña nos convoca a intensificar la lucha contra la pobreza y el hambre, movilizando más todavía a los agentes pastorales y a los fieles, así como a todas las personas de buena voluntad, en asociación con otros actores que comparten nuestros valores y nuestras convicciones” De lo que se trata, añadió monseñor Omella, es de “instaurar estructuras de reflexión y acción a todos los niveles, a fin de que, respetando el principio de subsidiariedad, cada cual aporte su contribución a la eliminación del escándalo del hambre en el mundo”. El objetivo prioritario de esta iniciativa global auspiciada por el Papa Francisco y realizada por la Confederación Caritas Internationalis es terminar con el hambre para el 2025. La implementación del derecho a la alimentación en los países en los que no está garantizado es una medida fundamental para eliminar el hambre en el mundo. Para ello, dentro de la Campaña se elaborará un anteproyecto de ley para promover el derecho a la alimentación, que será remitido a los Gobiernos nacionales de cada país para que lo adopten. En el marco de la campaña, además, se abogará también ante las Naciones Unidas para conseguir la realización de una sesión sobre el derecho a la alimentación durante la Asamblea General de 2015. Dentro de cada país, se identificarán una serie de objetivos nacionales que aborden los temas de la pobreza en sus respectivos territorios, como, por ejemplo, el desperdicio de la comida y la promoción de la horticultura, o realizando acciones de incidencia ante los propios Gobiernos. La campaña “Una Sola Familia Humana, Alimentos para Todos” se basa en el principio de que cualquier cambio real debe originarse primero y sobre todo en nosotros mismos y en nuestra capacidad de ver el rostro de Jesús en quienes padecen hambre. Cuando empezamos a buscar profundamente, en nosotros mismos, nuestro sentir sobre los temas vinculados al hambre, tanto en casa como fuera, nos damos cuenta que solo trabajando como una sola familia humana, con espíritu de compasión y unidad, podremos finalmente poner fin a una grave injusticia: que habiendo alimentos suficientes en el mundo, la gente todavía pase hambre. Autor: diocesismalaga.es