NoticiaComunicación ¡Hola! Publicado: 01/12/2011: 1409 Es un privilegio disfrutar de la capacidad de comunicar. A lo largo de los siglos quienes se han encontrado con Cristo resucitado han sentido la irrefrenable necesidad de contar lo que han experimentado. Hoy igual que ayer los testigos de la fe sentimos la urgencia de comunicar a todos sin excepción la verdad y belleza del Evangelio. En comunión. Doy gracias a Dios por regalarnos la posibilidad real de comunicar su buena noticia en los albores del siglo XXI. Con las técnicas de hoy. Con el lenguaje de hoy. Con el mensaje de siempre. Somos herederos de la rica tradición evangelizadora en nuestra diócesis, tarea en la que los diferentes delegados episcopales de comunicación han tenido un importante papel. Hoy me siento urgido, desde la gratitud y responsabilidad, como eslabón más de la cadena, a seguir favoreciendo que Cristo sea conocido por todos. Y lo hago con especial agradecimiento a nuestro obispo que me ha confiado esta tarea y a los anteriores delegados de medios de comunicación, muy especialmente, a mi hermano en la fe Juan Antonio Paredes que ha sido determinante, junto a su equipo de profesionales y voluntarios para que la delegación de medios se encuentre en el punto en el que está. Deseo que el Evangelio sea conocido por todos los que vivimos en la hermosa diócesis de Málaga. Entiendo que nuestros medios de comunicación deben ser casa y escuela de comunión y trasparentar el rostro de Dios para facilitar la experiencia trascendente. Para ello es imprescindible contar con modelos de santidad. Es lo que deseo y pido al Señor: que caminemos por sendas de santidad para que fluya de forma espontánea la comunicación cristiana. Rafael J. Pérez Pallarés, delegado diocesano de medios de comunicación @RafaPrezPallars Autor: diocesismalaga.es