NoticiaEl santo de la semana San José Obrero, custodio de los trabajadores y sus familias San José según el proyecto “SaintsProyect” de la fotógrafa Kristyn Brown Publicado: 01/05/2022: 10661 Aunque el día de san José, esposo de la Virgen, se celebra el 19 de marzo, lo cierto es que el primer día de mayo conmemoramos también a san José, el padre de Jesús, esta vez bajo la advocación de “Obrero”, en una fiesta cuya historia es relativamente reciente. El 1 de mayo es celebrado en gran parte del mundo como el Día Internacional de los Trabajadores, una jornada que surge en el ámbito civil, pues el primero de mayo de 1886 se inició en Chicago el movimiento obrero que lograría la consecución de la jornada de ocho horas. Poco después, en 1891, el papa León XIII publicaría su famosa encíclica Rerum Novarum, en la que ahondaría en los problemas que la Revolución Industrial había traído consigo, abogando por la justicia social y los derechos de los trabajadores a asociarse en sindicatos. Sería el papa Pío XII quien, en 1955, ahondando en la Doctrina Social de la Iglesia, propondría cristianizar la fiesta del trabajo «con la atención de que todos reconozcan la dignidad del trabajo y que ella inspire la vida social y las leyes fundadas sobre la equitativa repartición de derechos y de deberes». «El humilde obrero de Nazaret --afirmaba el Papa en el discurso de institución de la fiesta– no solo encarna, delante de Dios y de la Iglesia, la dignidad del obrero manual, sino que es también el próvido guardián de vosotros y de vuestras familias». No es Barbarela, es San José En Málaga hay diversas instituciones bautizadas bajo la advocación de san José Obrero, entre ellas, el Centro Periférico de Especialidades San José Obrero, del Servicio Andaluz de Salud. Dicho así a pocos les suena, puesto que, popularmente, este centro médico es conocido como Barbarela. El origen está en el parecido del edificio, por su forma semicircular, con una discoteca de Torremolinos que llevaba ese nombre en la época en la que se inauguró, allá por los primeros años 70. San José Obrero cuenta también con una parroquia dedicada a su nombre, situada precisamente en una barriada obrera, la de Carranque, cuya primera piedra fue bendecida por el Cardenal Herrera Oria, artífice de aquel gran proyecto urbanístico. L’Osservatore Romano calificaría la iniciativa como “una gran obra social del Obispo de Málaga”. Asimismo, la zona de la Granja Suárez cuenta con el colegio diocesano San José Obrero, inaugurado el curso 1969-70 y perteneciente hoy a la Fundación Victoria.