Después de la Eucaristía, el Ayuntamiento hizo la ofrenda floral al paso de la comitiva por la puerta del Consistorio en la plaza de los Naranjos. La alcaldesa brindó su apoyo a la Hermandad del Rocío de Marbella y deseó a sus integrantes un feliz trayecto de ida y vuelta el próximo fin de semana. Ya por entonces la fiesta era más que evidente. Después de un buen desayuno, sonaron los primeros compases al ritmo de tambores y alguna que otra guitarra. Algunos se arrancaron a cantar mientras el cielo anunciaba con el estallido de cohetes que un año más Marbella iba camino de la aldea almonteña. La comitiva hizo parada primero en el Palacio de Congresos y Exposiciones, desde donde partieron después de asistir a la misa y ser testigo de la ofrenda floral.