NoticiaMúsica Tito García: «Estoy seguro de que en mi música hay una impronta de las misiones» Publicado: 09/05/2022: 10613 Estreno El compositor Tito García González estrena en Málaga su obra dedicada al V centenario de la primera vuelta al mundo de Juan Sebastián Elcano. La Sala María Cristina acogerá el 20 de mayo su recital "Hacia Beethoven, el intérprete compositor", en el que este salmantino criado en Málaga interpretará por primera vez "Trinidad", una pieza de improvisación dedicada al buque insignia de la expedición que partiera de España capitaneada por Magallanes, y "Salve Regina", basada en el canto gregoriano. Jugar a las canicas entre lagartijas y camaleones en "el campillo", nombre popular de la parcela que hoy ocupa el Parque del Oeste de la capital malagueña, forma parte de los recuerdos infantiles de Tito García González, pianista hoy afincado en Madrid con una larga trayectoria como concertista internacional. Pocos solistas pueden presumir de haber actuado en salas tan prestigiosas como la Carnegie Hall de Nueva York, la Filarmónica de Berlín, el Teatro Colón de Buenos Aires o el Auditorio Nacional de Música de Madrid. El 20 de mayo, a las 19.30 horas, en la Sala Unicaja de Conciertos María Cristina el compositor regresa a Málaga con un programa cuya primera parte consistirá en un bis a bis con Beethoven, en la que se podrán escuchar dos de sus más famosas obras para piano: las sonatas "Patética" y "Tempestad", junto a las composiciones propias: "PostLudio a Ludwig" y "Remembering Bernstein". La segunda parte consistirá en el estreno mundial de la Fantasía Sonata nº1 dedicada al V Centenario de la primera circunnavegación marítima de la historia, y en la interpretación de "Guernica", una pieza que ha querido recuperar con motivo de la guerra de Ucrania. El viaje de Magallanes y Elcano, una gesta cuya vertiente evangelizadora está siendo muy celebrada en los países que recibieron la fe gracias a ella (como Filipinas, con 100 millones de católicos), ha sido una oportunidad para que el compositor malagueño saque a la luz sus señas de identidad. Con tres tíos religiosos, uno perteneciente a la congregación de los Sagrados Corazones y misionero en Puerto Rico; y dos redentoristas, afirma conocer muy de cerca la labor de la Iglesia: «Seguro que hay una impronta de las misiones, que conozco desde muy niño, en mi obra. Las conozco también muy de cerca pues soy profesor de piano en la Universidad de Comillas, de la Compañía de Jesús, y he estudiado mucho las reducciones jesuiticas en América. Espero que haya algo de todo esto en mi obra cuando pasen los años». "Trinidad" y "Salve Regina" Trinidad era el nombre del barco desde el que Magallanes partió rumbo a las islas de las especias y también el título del primer movimiento de la sonata que será, sin duda, único; pues tiene la originalidad de no estar compuesto, sino de ser creado en el momento. «Quería significar el espíritu emprendedor de estos hombres que se abandonaban a la providencia, pues con los mapas de navegación con que contaban no sabían lo que iba a sucederles –afirma el compositor–. Magallanes suponía que existía un paso hacia el Pacífico, pero hasta que no llegaron al estrecho que luego tomaría su nombre, todo era una incógnita. Igualmente, en esta pieza, no sabemos qué va a sonar, porque a partir de tres notas que elegirán tres personas del público al azar, iré haciendo improvisaciones de tres en tres». El segundo movimiento tiene, asimismo, un componente espiritual. «Se titula Salve Regina y es una pieza muy emotiva que dediqué a una amiga mía que falleció el año pasado –señala–. Se trata de la grandisima compositora hispano argentina Claudia Montero, que ha sido para mí mi hada madrinda. Está basada en un canto gregoriano a María y, a partir de ese canto monódico, he hecho una pieza con toques de jazz y tango habanera muy emotiva».