En la fiesta de Cristo Rey de 2014, el 23 de noviembre, recibió la ordenación como diácono, de manos del Sr. Obispo, D. Jesús Catalá, en la parroquia Cristo Rey, en Ciudad Jardín.

El sacerdote Luis Jiménez, Misionero de la Consolata en Málaga, afirma que ha sido «una gran alegría tener a Carlos estos dos años en Málaga, en los que ha hecho un gran servicio en la catequesis de la parroquia del Rosario, en Ciudad Jardín». En unos meses volverá a España, pero en esta ocasión a la ciudad de Elche.

Ordenación sacerdotal

«No somos nosotros los que hemos escogido al Señor; ni la vocación es ante todo una elección nuestra como si se tratara de una carrera profesional. No. Ella es siempre, y en primer término una llamada de lo alto», expresó Monseñor Gustavo García Naranjo, durante la ordenación sacerdotal del Misionero de la Consolata Carlos Salazar, que se celebró en el auditorio de la U.E. “José Nicomedes Marrero”, en Panaquire, estado Miranda.

El Obispo de la Diócesis de Guarenas estuvo acompañado del padre Stefano Camerlengo, superior general del Instituto Misioneros de la Consolata; y el superior de la delegación de Venezuela, padre Peter Makau, entre otros religiosos e integrantes del clero diocesano.

«Por la consagración quedarás sellado con una nueva identidad como sacerdote misionero del Señor; actuarás en nombre de Cristo; serás administrador de sus sacramentos para bien del pueblo de Dios; presidirás en servicio eucarístico en la Iglesia y deberás ofrecerte a ti mismo, juntamente con el Señor en el Altar para ser con él victima viva para alabanza de su gloria y salvación de los hombres», expresó.
Y añadió: «Valeria, tu abuela materna, te enseñó a rezar tus primeras oraciones con sencillez. Con su gran amor, ella hizo todo lo posible por lo que ahora vas a ser: un sacerdote».

Según explican los participantes en la celebración, «la procesión ceremonial partió a las 10 de la mañana desde el templo parroquial de “Nuestra Señora de la Candelaria". La diminuta imagen de la patrona iba al frente de la caminata adornada con flores del lugar, entre alegres cantos de una feligresía que desde esta fecha puede decir que cuenta con un sacerdote surgido de entre sus vecinos. El padre Peter dio a conocer que el joven religioso retornará a Elche, España, para seguir con este compromiso de entrega Dios a quien en esta fecha se ha consagrado definitivamente. También es de destacar que un ensamble de músicos de Panaquire, Tapipa y El Clavo, acompañó con sus alegres ritmos durante la eucaristía, así como la participación de jóvenes parroquianos que hicieron presentaciones culturales en torno a los valores. Al finalizar la Eucaristía, se compartió la comida y los músicos continuaron deleitando la gran fiesta de esta comunidad mirandina».