NoticiaJuventud Un piso para estudiantes afectados por la crisis Publicado: 24/10/2013: 3837 Cáritas Diocesana y la Delegación de Pastoral de Infancia y Juventud de la Diócesis de Málaga ayudarán conjuntamente a estudiantes universitarios o de ciclos superiores de la provincia cuyas familias acrediten una situación económica insuficiente para afrontar el pago de una vivienda de alquiler o el traslado diario desde sus municipios de origen a la capital malagueña. Los jóvenes que sean seleccionados para este proyecto convivirán en un piso facilitado por Cáritas, mientras que un miembro de la Delegación de Juventud los pondrá en contacto con las parroquias de la Diócesis para posibilitar su permanencia en la fe.La experiencia se iniciará en las próximas semanas. Este primer año beneficiará concretamente a tres chicas estudiantes que vivirán juntas durante todo el año académico, mientras cursan sus estudios. Para próximos cursos se plantea que también pueda destinarse a chicos. Las familias de las jóvenes, con ingresos inferiores a los necesarios para pagar una plaza en una residencia o bien un piso, se verán así aliviadas del desembolso que conlleva un alquiler o el transporte hasta su centro de estudios en la capital. «RESPUESTA A LAS NECESIDADES DE NUESTRO TIEMPO» «Es una nueva respuesta de la Iglesia a las necesidades de nuestro tiempo», resume Francisco José Sánchez, director de Cáritas en Málaga. «Desde Cáritas Diocesana de Málaga, haciéndonos eco de la necesidad de los estudiantes en el momento en el que vivimos, pensamos que uno de los recursos que tiene Cáritas, que es un piso, pudiera ser destinado gratuitamente a estas personas». Cáritas Diocesana, de esta manera, correrá con los gatos de mantenimiento del inmueble durante el curso 2013-2014, mientras que las jóvenes que vivan en él tan solo tendrán que afrontar los correspondientes al suministro eléctrico, el teléfono y el agua. «Cáritas pone a disposición el recurso, el medio, y la Pastoral de Infancia y Juventud desarrolla la actividad de acompañamiento para las chicas», precisa Francisco José Sánchez. El sacerdote Salvador Gil, delegado de Infancia y Juventud de la Diócesis de Málaga, se muestra muy satisfecho al poder participar con Cáritas en esta experiencia. «Nosotros, desde el momento en que Cáritas nos lo propuso, aceptamos enseguida la idea. Una de las características fundamentales de esta crisis es que los jóvenes son los más perjudicados. Esto es un pequeño signo, un humilde signo, que nos ayudará a testimo- niar que la Iglesia está presente y preocupada por la realidad de los jóvenes». COMPAÑÍA EN LA FE El proyecto no solo pretende aportar una vivienda para las jóvenes procedentes de familias en crisis. Según Salvador Gil, «la Delegación de Juventud de la Diócesis también hará posible que las estudiantes se mantengan en la fe, sugiriéndoles las parroquias a las que deberían dirigirse o indicándoles activida des diocesanas a las que podrían acogerse en su día a día». «A veces ocurre que los jóvenes que proceden de realidades rurales pierden el contacto con la Iglesia cuando se trasladan a la capital. Con este proyecto se pretende que no sea así, queremos que sigan participando en la vida de la Iglesia», apunta Salvador. El delegado de Juventud de la Diócesis asegura que el proyecto verá cumplidas sus expectativas si las jóvenes que se acogen a él consiguen estudiar y labrarse un futuro digno. ¿CÓMO SOLICITAR LA AYUDA? El plazo para solicitar esta ayuda a Cáritas sigue abierto. Cualquier persona interesada en presentarla puede enviar su petición al Secretariado General, a través del e-mail: caritas@diocesismalaga.es. La solicitud deberá aportar una carta de presentación del párroco de su municipio, los datos personales de la chica que opta a la plaza, y una copia de la declaración de la renta de su progenitor. Autor: Ana Oñate @anatecam