NoticiaAño de la Misericordia Testimonios de la Misericordia en la Axarquía Pieter Christian Jongeneel Andérica, nadador testimonio en la mesa redonda Publicado: 08/11/2016: 6002 El 27 de octubre tuvo lugar en la Casa Hermandad de la Cofradía de Estudiantes de Vélez-Málaga una mesa redonda en la que se pudieron escuchar varios testimonios de personas que viven en primera persona las obras de misericordia. Comenzaron con la hermana Dori Del Río, de las hermanas de la Caridad, quien resumió a sus 80 años toda una vida entregada de 60 años junto a gente que la sociedad rechaza en la labor de reinserción de los presos. A través de pisos de acogida de presos y de presas y con talleres últimamente de reciclaje de ropa para tener esa nueva oportunidad que Dios te da. Una especial dedicación también a presos inmigrantes que se meten sin darse cuenta en lugares oscuros de la vida y cuyo objetivo no era otro que llevar a sus familias ese pan que les falta en sus lugares de origen. Seguidamente, tomaba la palabra la hermana Juani Torres Gutiérrez, cordobesa de nacimiento, villafranqueña, pero que se considera colombiana donde ha vivido 28 años con las Hijas del patrocinio de María, ayudando a miles de chavales de zonas de exclusión social. Un lugar de la tierra donde se tiene antes un arma en casa que un trozo de pan. Donde a través de la educación, se intenta que estos niños y niñas tengan ante sí un futuro distinto al que el entorno les promete y que algunos de ellos son utilizados en el narcotráfico por las mismas familias. Ofreció el empadronamiento de estos niños que a través de los colegios de España de la congregación se realiza para promover el estudio y las ayudas necesarias en el ámbito de la salud en casos concretos. En aquella zona, a través de la educación, buscan construir el Reino de Dios, dando vida con sentido actualmente a unos 2000 niños y jóvenes de la zona. Finalmente, el testimonio llegó de la mano de un nadador, Pieter Christian Jongeneel Andérica, cuya familia materna es de Vélez-Málaga aunque reside en Málaga. Es hermano desde pequeño de la cofradía de Estudiantes que acogía la mesa redonda. Fue deportista de élite en el mundo de la natación, siendo uno de los nadadores de larga distancia más destacados en el ámbito internacional. Superada su etapa de competición de alto nivel, junto a compañeros y amigos, encabeza el proyecto de Brazadas Solidarias en el que hace frente a retos extraordinarios a través de mares y océanos de todo el mundo. Está convencido de que el deporte es un motor de cambio social y un canal extraordinario de transmisión de valores. Para ello entró en contacto con la Fundación Vicente Ferrer, visitando los proyectos que posee en una de las zonas más necesitadas de la India, el distrito de Anantapurque, y comenzó a organizar travesías a nado populares con fines solidarios e involucrando así a más nadadores cada temporada en las costas andaluzas, asumiendo además retos personales de mayor calado como cruzar el Canal de Menorca, el Estrecho de Gibraltar, el Canal de la Mancha, la travesía Peniche a las Islas Berlangas (Portugal), travesía de Al-Assad (Siria), Puerta de la India en Mumbai (India), el Río de la Plata (Uruguay), Estrecho de Cook (Nueva Zelanda), Canal de Santa Catalina (EEUU), y la última en septiembre pasado cuando se convirtió en el primer nadador no estadounidense en dar dos vueltas a la isla de Manhattan (EEUU). Ejemplo de cuando los retos personales se convierten en fuente de solidaridad. Un acto más de los organizados en la Axarquía con motivo de la Clausura del Año de la Misericordia decretado por el papa Francisco.