Noticia La evangelización Publicado: 07/11/2014: 5654 Dios es uno, es único. No hay otros dioses fuera del Señor. Esta verdad de fe aporta sentido teológico a la historia. La teología de la historia es un aspecto esencial de la nueva evangelización, de la misión. Los hombres y mujeres de hoy necesitan reencontrar una visión global del mundo y del tiempo; una visión verdaderamente libre y pacífica; la visión que el Concilio Vaticano II transmitió. Pablo de Tarso afirma que no se evangeliza de manera aislada y recuerda que el anuncio siempre debe ir precedido, acompañado y seguido por la oración. Todo misionero del Evangelio siempre debe tener presente esta verdad: es el Señor quien toca los corazones con su Palabra y su Espíritu. Y lo hace llamando a las personas a la fe y a la comunión en la Iglesia. En la Iglesia diocesana y universal. La evangelización, para ser eficaz, necesita sí o sí la fuerza del Espíritu. Una fuerza que infunde en quien anuncia el Evangelio una «plena convicción». Este término, en el original griego, es pleroforía. Expresa plenitud, fidelidad e integridad, en este caso, del anuncio de Cristo. Anuncio que necesita ir acompañado de gestos, como hacía Jesús. Palabra, Espíritu y convicción concurren para hacer que el mensaje evangélico se difunda con eficacia.