NoticiaPeregrinaciones Más de 3.500 malagueños al año peregrinan a Santiago de Compostela Publicado: 25/07/2016: 4686 El 25 de julio celebramos el día del Apóstol Santiago, patrón de España. Será un día de fiesta para la Asociación de Amigos del Camino de Santiago en Málaga, que celebra su vigésimo aniversario con la vista puesta en el año 2017, año en el que la ciudad de Antequera acogerá el XI Congreso Internacional de Asociaciones Jacobeas. La capilla del Cister acogerá este lunes, fiesta de Santiago Apóstol, la Eucaristía a la que están convocados los más de 200 socios de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago. Será a las 20.00 horas y, al finalizar, tendrán un rato de convivencia. Esta entidad se encarga de promover la devoción a esta práctica secular de caminar a la tumba del apóstol Santiago, y, especialmente, de mantener y cuidar los caminos utilizados durante siglos para llegar a Compostela. Es el conocido como Camino Mozárabe de Málaga, que empieza en la Iglesia de Santiago de la capital, pasa por Almogía, Villanueva de la Concepción, Antequera, Villanueva de Algaidas y Cuevas Bajas. Ya en Córdoba, sigue por Encinas Reales, Lucena, Cabra, Doña Mencía, Baena, Castro del Río, Espejo y Santa Cruz hasta la capital cordobesa. Y es que, según el vicepresidente de la asociación, Ramón Taboada, «parece ser que los mozárabes debían pasar por Córdoba para pedir permiso oficial». La ruta hacia Santiago con salida desde Málaga está planificada en 52 etapas con un total de 1.300 kilómetros «sin equivocaciones» como apostillan desde Amigos del Camino porque hay quien se pierde y tiene que desandar lo andado. Para evitar esto, una de las tareas de la asociación es, precisamente, mantener la señalización a lo largo del Camino. Para ello, los miembros de la asociación organizan mensualmente un recorrido por una de las etapas hasta Córdoba. De esta manera, según Emilio Hidalgo, responsable de atención a los medios de la asociación, «se puede decir que cada año, como mínimo, se repasa todo el trayecto cuyo mantenimiento corresponde a esta asociación». Lejos de quedarse en una tradición del pasado, el Camino de Santiago está muy vivo y son muchos los jóvenes y mayores que se siguen animando a vivir esta experiencia inolvidable. La prueba de su vigencia es que sólo desde esta asociación se reparten cada año alrededor de 2.000 credenciales de peregrinos, a las que hay que unir las 1.500 que se distribuyen desde la Librería Diocesana, lo que significa que un mínimo de 3.500 malagueños realizan el Camino anualmente. Según Hidalgo, «el hombre de hoy, como el de ayer, está necesitado de una revisión de su ser y estamos llenos de polvo, de contaminación, de vacuedad... Pegarse unos días intentando reconocerse uno mismo, dándose una ducha de humanismo, es una terapia muy válida». Para José Luis Hidalgo, vocal de atención al peregrino de la entidad, «el Camino enrasa a todas las personas al desprenderte de todo, al compañero lo ves como a un igual. En un mundo mercantilizado como el nuestro, la experiencia de la acogida, la hospitalidad y la gratuidad en el camino, marca».