El retiro fue dirigido por el el delegado para el Clero de la Diócesis de Málaga, Francisco González.

El encuentro contó con la participación, del Obispo de la diócesis jiennense, Mons. Sebastián Chico, quien presidió la Eucaristía y compartió posteriormente con los participantes la comida y una puesta en común en un ambiente de fraternidad. «Los sacerdotes pudieron compartir sus testimonios, y responder a las preguntas que les formularon los seminaristas», señala Raúl Contreras, delegado para el Clero de Jaén y director espiritual de aquel Seminario, quien recalca que «es muy positivo que sacerdotes y seminaristas puedan tener estos encuentros fuertes con el Señor al mismo tiempo, pues se fomentan la oración y la fraternidad sacerdotal. Este encuentro tuvo también una emotiva despedida, pues los sacerdotes Manuel Ceacero y Francisco Javier García cumplían los diez años de pertenencia al clero joven. D. Sebastián hizo entrega a los dos presbíteros de un pequeño detalle para recordar este momento».

Tras el retiro, los seminaristas y sus formadores continuaron durante los siguientes días revisando el curso en un ambiente de descanso y convivencia fraterna.