Manuel Márquez, delegado de Catequesis afirma que todas las parroquias ofrecen la posibilidad de seguir madurando en la fe ya iniciada y de celebrarla.  

«Esta etapa, llamada en Málaga hasta ahora “perseverancia”, en el nuevo proceso se llama: etapa de “maduración en la fe”, porque la Iglesia, ofrece de nuevo una formación sistemática y básica de lo esencial de la fe, para que el niño vuelva a profundizar y saborear el credo antes recibido. Son muchas las parroquias que ofrecen además actividades complementarias, adaptadas a los niños de esta edad: actividades culturales, socio-caritativas (visitas a centros de personas necesitadas, solidaridad), al aire libre y deportivas».