DiócesisComentario al Evangelio Comentario al Evangelio del Domingo de la Palabra de Dios, por José Luis Fernández Orta José Luis Fernández Orta, profesor y miembro de la HOAC Publicado: 17/01/2023: 624 José Luis Fernández Orta, profesor y miembro de la HOAC, y profesor también de los Centros Teológicos de la Diócesis de Málaga, ayuda a profundizar en el Evangelio del Domingo III del Tiempo Ordinario, Domingo de la Palabra de Dios, 22 de enero (Mateo 4, 12-23). Hoy sigue brillando su luz Cuando abrimos una tertulia, no es difícil escuchar que las cosas no van bien. El cansancio es lo cotidiano. La queja está presente entre nosotros. Tiempos de tinieblas y de sombras a pesar de las promesas que se nos ofrecen. Y en medio de tanta oscuridad, nos ha brillado la verdadera luz, no la que se enciende y se apaga al son de las músicas de los tiempos que corren. Una luz que cumple todas las promesas de paz y que aparece donde menos la esperamos. Y esa luz nos llama a un cambio en nuestras vidas: acoger su Buena Noticia que no es otra que la de que el reino de Dios, no el de los poderosos, está en medio de nosotros. Esta es la oferta que se nos hace: se nos quiere salvar o liberar, haciendo posible la paz y la concordia. Este es el reto que tenemos: darle la vuelta a un sistema que se basa en la competitividad, el individualismo, la lucha del fuerte contra el débil. No podemos dejar que esa luz que nos brilla, que sale de nuestras fronteras y que anuncia la salvación a toda la humanidad, quede encerrada en medio de cuatro paredes, sería ir contra el Evangelio. Ser pescadores de hombres es llevar esa luz que nos brilla a todos los ámbitos de la sociedad en la que vivimos aportando a todos “buenas noticias” de salvación. El reino de Dios ya está en medio de nosotros. Que cada uno sepa dónde y a quién le lleva su luz. Diócesis Málaga @DiocesisMalaga Más artículos de: Comentario al Evangelio Comentario al Evangelio del IV Domingo del Tiempo Ordinario, por José María SouvirónComentario al Evangelio del Domingo II del Tiempo Ordinario, por Luis Rosa Invernon Compartir artículo Twitter Facebook Whatsapp Enviar Imprimir