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Lectio Divina para el IV domingo de Pascua

Publicado: 06/05/2014: 9329

Lectio
Este cuarto domingo de Pascua, ligado a la imagen del Buen Pastor, me invita a acercarme a este capítulo décimo del Evangelio de Juan lleno de gozo y alegría. Ante una imagen tan bíblica me preparo para acoger la Palabra con toda su riqueza: sugerencias éticas y espirituales. Leo detenidamente y con unción el texto y retengo en el corazón lo que más me conmueva.

Meditatio
Tras unos momentos de silencio y lectura reposada, trato de descubrir el mensaje de este pasaje. El contexto literario del “discurso del buen pastor” lo sitúa a continuación del signo de la curación del ciego de nacimiento (Jn 9), por ello aunque cambien las imágenes; el tono polémico y la temática de fondo siguen siendo los mismos. Observo las personas, los oficios, los lugares y los objetos relacionados con el mundo pastoril que aparecen en el texto: ¿con cuáles se identifica Jesús? Aunque en este comienzo Jesús no se identifica claramente con el buen pastor, ya insinúa que es él y todas las expresiones hablan de una relación personal de intimidad y confianza entre Jesús y sus discípulos. La otra cara de la moneda la representan aquellos que Jesús tacha de “ladrones”, “salteadores”, (Jn 9, 39-41). No cabe duda de que son los fariseos los mismos que se enfrentaron a propósito de aquel signo del ciego. “El redil” simboliza aquí a Israel y si el pastor “saca fuera” a las ovejas es para librarlas de los abusos de los que “roban, matan y destruyen”. En la segunda parte del pasaje Jesús por dos veces habla de que él es “la puerta de las ovejas”. Esta imagen evoca seguridad, acogida, defensa ante los peligros, posibilidad de entrar y salir, de quedarse fuera o dentro. Con ella Jesús se presenta como el paso obligado por el que deben entrar quienes quieran “estar a salvo” y encontrar todo aquello que necesitan. “Pastor” y “Puerta” vienen a significar lo mismo: Jesús es el único mediador de la salvación que Dios ofrece a su pueblo.

Oratio
Jesús es el pastor y la puerta de las ovejas: ¿Cómo me ayudan estas imágenes a conocer mejor al Señor? ¿Qué tipo de relación me invitan a establecer con él? ¿Qué actitudes y acciones me sugieren estas imágenes como seguidor de Jesús? Desde el corazón dialogo con el Señor.

Contemplatio
Estas imágenes que se aplica Jesús a sí mismo, me aseguran que estoy en buenas manos, bien protegido y acompañado. Aprovecho este momento para sentir de nuevo como mi vida está en manos del Señor y me gozo, me alegro y me dejo envolver por su cercanía y ternura.

Actio
Para que la Palabra se haga vida: ¿cómo podría ser para los demás pastor y puerta?

Antonio Collado

Sacerdote diocesano

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