«Fue un momento inolvidable, tuvo lugar el 10 de diciembre, día de Nuestra Señora de Loreto, patrona del ejército del aire. Como militar que soy, que esta gran noticia me la dieran en este día, me llenó de felicidad. En el momento en el que me llamó el presidente de la cofradías, me encontraba montando el belén en casa. Menudo Belén se formó en mi vida y sobre todo, en mi corazón. En un principio, dije que no por mis circunstancias personales pero me insistieron tanto, que decidí dar este paso tan importante. Hasta el día de Santa Lucía, cuando les comuniqué que lo haría».

«Para mí la Semana Santa de Antequera es un puzzle muy complejo de muchísimas piezas y me gustaría no haberme dejado atrás ninguna de esas partes de tradición y religiosidad que la componen. También he querido destacar las particularidades en sí de la Semana Santa de Antequera, cómo se viven aquí estos grandes días y por último, he mostrado el sentimiento que me produce, mi dimensión personal. Todas estas piezas que para mí, es muy difícil de plasmar en un papel».