NoticiaDiócesis El sentido del dolor en una sociedad que no quiere sufrir María Santísima de los Dolores (Servitas) Publicado: 19/03/2016: 10094 En su homilía en la Fiesta de los Dolores de la Santísima Virgen celebrada el 18 de marzo en la parroquia de San Felipe Neri, el Sr. Obispo afirmó que «estamos en una sociedad que no quiere sufrir, ni quiere el dolor; por eso ha inventado muchos antídotos contra el dolor» «Pero hay otros dolores que se rechazan, continuó Mons. Catalá, que son propios de la vida humana, de la convivencia familiar, de la educación de los hijos, de la sociedad; para estos sufrimientos no hay “pastillas” contra el dolor. En esta sociedad, que huye del dolor, la Virgen de los Dolores nos da una grandísima lección: María no rehuyó ni rechazó el sufrimiento. María pudo estar lejos del calvario; pero estuvo al pie de la cruz, como hemos escuchado en la Secuencia del “Stabat Mater”; estaba en pie junto a su Hijo, sin aminorar ni suavizar su dolor. ¿Cómo nos unimos a los sufrimientos de Cristo y a los dolores de la Virgen? El sufrimiento hace crecer espiritualmente; sobre todo cuando nos unimos a Cristo y a su Madre. Hoy la Virgen nos invita a saber estar ante el sufrimiento propio y el de los demás, porque esos sufrimientos son participación en los sufrimientos de Cristo y de su Madre Santísima». En su alocución, el Obispo de la Diócesis Malacitana se refirió a la imagen venerada por la Tercera orden Servita: «La imagen de la Virgen Dolorosa, que contemplamos, es obra Fernando Ortiz, puesto que la precedente imagen, atribuida a Pedro de Mena, fue quemada en 1931, en los trágicos días del inicio de la Segunda República, que tanto daño hizo en el patrimonio religioso cofrade de Málaga. No conviene olvidar esa historia; no para lamentarnos, sino para aprender la lección de que no deben repetirse estos hechos y que la convivencia debe estar por encima de las ideologías. El respeto a la libertad religiosa es fundamental; cuando no se respeta, quiebran las demás libertades. ¡Aprendamos esta lección!». El texto completo de la homilía está disponible en el siguiente enlace