NoticiaActualidad Dios llega a los jóvenes por internet Publicado: 13/05/2010: 4938 Una ventana abierta al mundo, un nuevo púlpito desde el que proclamar el Evangelio, un espacio de diálogo sobre temas de actualidad... Son algunos de los calificativos que se usan dentro de la Iglesia para referirse a internet. Y es cierto, la Diócesis de Málaga puede corroborar que internet ha sido, y sigue siendo, todo esto y mucho más. Así lo recoge la revista "Diócesis" en su artículo de "Redacción". Sólo algunos ejemplos: Son muchos los jóvenes que han conocido las experiencias vocacionales de la diócesis gracias a la web: Campo de Trabajo Lázaro, Monte Horeb, Sicar y Seminario Menor. Y no nos olvidamos de que, hace dos años, un sacerdote malagueño, Antonio Guzmán, fue el protagonista de uno de los spots nacionales de la campaña de sostenimiento económico de la Iglesia, gracias a una entrevista que se le realizó en un programa de Popular Tv Málaga y que después se colgó en la web. Y cómo no hablar del trabajo de diálogo tan hermoso que se realiza con los jóvenes a través de las redes sociales (facebook, tuenti, etc.). La web del Secretariado de Juventud y la televisión por internet Diócesis Tv, sin olvidar las webs de las parroquias. Un vídeo, un artículo, una entrevista son la excusa perfecta para entablar un diálogo con alguien que busca respuestas en su vida. EDITH, LA JOVEN QUE LLEGÓ A LAS CARMELITAS POR INTERNET. Edith es una joven salvadoreña, tímida, pero muy simpática, que contó al padre Ángel García y al fotógrafo Javier Cebreros, colaboradores de esta publicación, cómo entró en contacto con las carmelitas por internet. Lleva nueve años en Málaga, después de dejarlo todo: sus estudios de Administración de Empresas, un novio, una familia... Edith confiesa que estaba contenta en su país, con su familia, y participando en la parroquia, pero le faltaba algo para ser feliz. Y así fue como un día llegó a sus manos un libro de sor Isabel de la Trinidad. “Ahí descubrí que yo podía ser feliz siguiendo a Cristo por el camino de las carmelitas de clausura”, afirma. Y así comenzó su camino vocacional, que la llevó a ingresar en las Carmelitas Descalzas de Málaga. Esta joven lleva en su corazón a los más pobres y la historia de violencia y sufrimiento de El Salvador: “No he dejado El Salvador para refugiarme en un convento, sino que ha sido el Señor el que me ha traído aquí para orar y ofrecer mi vida por Él y por todos los que necesitan de Dios”, continúa. “Para mí, la clausura es un lugar privilegiado de encuentro con el Señor”. Autor: diocesismalaga.es