NoticiaColaboración Desde dentro Publicado: 02/05/2014: 14939 Está claro que la familia es importante. Es fundamental. Cuántas alegrías, y cuántas lágrimas. La Iglesia lanza continuamente, con palabras y con hechos concretos, un mensaje repleto de esperanza: acompañando a las familias, ayudando a los padres en la educación de los hijos, suscitando una cultura que genere vida de verdad, curando las heridas, acercando la luz del Evangelio a cada familia. No es una apuesta ni teórica ni ideológica. Es una necesidad. Apostamos por la familia con todos los medios, con espíritu crítico para detectar lo que va minando la vida de la familia y al mismo tiempo con autenticidad, construyendo la familia desde dentro para que sea mejor reflejo del amor de Dios y encarne y haga vida el Evangelio. Ayudemos a la familia, apostando en primer lugar por nuestras propias familias, con sus dificultades, con sus luces y sombras. Cada familia, tu familia, merece tu dedicación y tu tiempo, tu creatividad, tu alegría y tu misma vida.