José Antonio Sánchez Herrera, presidente de la Fundación Victoria, ha enfatizado que con esta iniciativa, los colegios diocesanos retoman parte de su espíritu rural original, haciendo de las parroquias diseminadas por la geografía malagueña un lugar de educación y promoción social. «El objetivo es llegar allí donde la oferta formativa no llega. La Fundación Victoria es heredera de la obra educativa centenaria en la Diócesis de Málaga, iniciada en las periferias por el próximo santo Manuel González y retomada por el cardenal Herrera Oria en los años cincuenta. Desde su inicio, Foovy, la escuela de idiomas de la Fundación ha tenido como objetivo llevar esta otra alfabetización, la del aprendizaje de idiomas, a núcleos donde no fuera posible acceder a ellos, algo parecido a lo que se hizo ya con las escuelas rurales y las capillas escuelas».

Dolores Rando, directora de la Escuela de Idiomas "Foovy", ha especificado que la escuela de idiomas es, ya en su tercer curso de vida, centro preparador Cambridge y centro examinador Trinity y ya ofrece clases en todos los centros escolares diocesanos de la provincia, llegando a prácticamente un millar de alumnos al año. Ahora se amplía a las parroquias, «un proyecto que es ya una realidad, ya que este curso comienza en dos parroquias: la de María Inmaculada, de Torre de Benagalbón y la de Santiago Apóstol, de Casarabonela. El número de alumnos está creciendo día a día.

El párroco de Torre de Benagalbón, el sacerdote Agustín Carrasco, ha participado en la convocatoria y ha compartido la riqueza de esta experiencia para los niños de esta localidad. «En esta aldea global, es fundamental aprender idiomas. Es muy bonito ver cómo las familias de estas zonas lo viven con una gran ilusión». Las clases, con precios ajustados al tratarse de una entidad sin ánimo de lucro, tienen también el objetivo de ofrecer trabajo a docentes de la zona donde se impartirán las clases, a la vez que dinamizar la vida de las parroquias. Están dirigidas a todos los niveles y edades, a partir de los tres años, y en palabras de José Sánchez Herrera, gracias al Fondo Social de Solidaridad de la Fundación, tratará de que nadie quede excluido por motivos económicos.

Las inscripciones se pueden realizar en las parroquias o través de la web de foovy.fvictoria.es.