NoticiaComunicación Lapidaciones en la era 2.0 Publicado: 13/12/2016: 18678 FIRMAS. Luis Santiago. Periodista y Community Manager. Los ataques sin piedad a Rita Barberá, incluso después de fallecer cuando publicaron en la Wikipedia que había muerto a causa de dos falsas enfermedades, se añaden a los sufridos por una larga lista de personas a manos de fariseos del siglo XXI. Atrincherados en delirantes ideas purificadoras, se ceban con figuras públicas al superar con creces los límites razonables de la sana y necesaria crítica contra la corrupción y la libertad de expresión. Barberá se suma a otros acosados. A Irene Villa, víctima del terrorismo, Mayte Carrasco, reportera, y Adrián, un niño con cáncer que quiere ser torero, les han insultado, amenazado y deseado la muerte. Las redes sociales son un conjunto de medios de comunicación basadas en la interacción de sus usuarios. Permiten un acceso rápido y constante a la información y al conocimiento, creando espacios para construir relaciones humanas y de solidaridad. Su instantaneidad facilita comentar, opinar y publicar un hecho antes que un medio de comunicación. Cualquiera crea sus perfiles en Twitter y, de alguna manera, tiene en sus manos un medio independiente a los convencionales. Su mal uso por una minoría, amparada muchas veces en el anonimato, crea sufrimiento y enrarece la vida pública. Los medios tradicionales amplifican estos incidentes con titulares como “las redes lapidan a” o “las redes estallan contra”. La repetición de estos episodios me plantea varias preguntas: ¿Qué clase de modelo de convivencia se está transmitiendo a los niños y adolescentes? ¿Los medios de comunicación podrían dedicar menos espacios a estos casos?