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«No hemos hecho otra cosa que ver a Dios por donde quiera que hayamos ido»

Publicado: 02/08/2013: 8218

•   Malagueños en Río

Casi 200 peregrinos de la diócesis de Málaga han participado en la JMJ de Río de Janeiro realizando posteriormente dos misiones populares: una en la ciudad de Santa Cruz y otra en la propia Río. El vuelo de vuelta está previsto que llegue a Málaga esta tarde.

Los peregrinos pertenecen a las parroquias malagueñas de San Patricio, San Antonio Mª Claret, Santo Tomás de Aquino, Ntra Sra. de Fátima, Purísima Concepción, San José (Estepona), Ntra. Sra. de la Asunción (Cómpeta), Cristo Resucitado (Torremolinos) y San Francisco Javier (Melilla), donde realizan el Camino Neocatecumenal. 
Estuvieron en la vigilia y en la misa con el Papa Francisco en la playa de Copacabana. Aunque, dada la multitud, pernoctaron esa noche en una de las calles adyacentes.

Los peregrinos han tenido tiempo estos días de visitar el santuario de la Virgen de la Peña, patrona de Río de Janeiro; de ver el famoso Pan de Azúcar o de bañarse en las maravillosas playas de Ipanema y Copacabana. También visitaron la catedral de Río de Janeiro, un espectacular edificio modernista, con forma cónica, que evoca la mitra episcopal. 

Los peregrinos participaron el lunes en el encuentro vocacional con los iniciadores del Camino Neocatecumenal: Kiko Argüello, Carmen Hernández y Mario Pezzi. Del grupo de 300 jóvenes de las diócesis de Málaga, Granada y Guadix-Baza que han compartido toda la peregrinación se levantaron un total de 14 chicos y chicas. Es una forma de ponerse a disposición del Señor para discernir una posible llamada al sacerdocio, a la vida contemplativa o a la misión evangelizadora que el Camino desarrolla en las zonas más descristianizadas del mundo.

El grupo realizó posteriormente una misión popular por las calles de Río y Santa Cruz entonando salmos y realizando el anuncio de la buena noticia (kerygma) en varias plazas. Allí mismo, varios jóvenes, chicos y chicas, dieron su experiencia de fe dentro de la Iglesia Católica. 

Para Carmen López, de la parroquia de San Patricio, «venir a Brasil es una aventura. ¡Qué país tan distinto a España y a lo que estamos acostumbrados! Hemos dormido en un hotel que era un antiguo zoológico y las condiciones no han sido de primera, pero eso es lo que vemos por donde quiera que vayamos: mucha precariedad. A pesar de ello, ha sido una experiencia increíble. Porque ver cómo tanta gente viene a un país en una situación difícil sólo con la finalidad de escuchar al Santo Padre es impresionante. Las palabras del Papa fueron súper buenas y todos los peregrinos coincidimos en que nos dieron mucha fuerza. El ambiente en nuestro grupo es buenísimo. Desde que llegamos no hacemos otra cosa que ver a Dios por donde quiera que vayamos: en la incomodidad, en las oraciones, en el compañerismo, en todo. A pesar de que no es una peregrinación cómoda estamos todos contentísimos, muy pocos quieren volver a su casa».

Beatriz Rando, por su parte, señala que le "ha impresionado escuchar del nuevo Papa que necesita de la ayuda de los jóvenes y que nosotros también tenemos una misión como cristianos. Personalmente vuelvo a Málaga contenta de ver que somos mucha la gente joven dispuesta a evangelizar en nuestro día a día".

Por su parte, Pablo Ruiz, también de San Patricio, afirma que la guinda de la JMJ ha sido "la misión popular que hemos realizado en Santa Cruz y Río. A eso estamos llamados todos los cristianos: a anunciar el evangelio. Y el poder hacerlo todos juntos, cantando y tocando las guitarras ayuda tanto al que escucha como al que anuncia".

El grupo ha iniciado el viaje de retorno a España esta madrugada, teniendo prevista su llegada al aeropuerto de Málaga en torno a las 16 horas de hoy viernes.

Autor: J.V.Rodríguez/A.Medina/A.Moreno

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