NoticiaMigraciones Círculo de Silencio, este miércoles, por los migrantes y refugiados Círculo del Silencio en la plaza de la Constitución de Málaga Publicado: 09/01/2023: 8257 Convocatoria Un mes más, la delegación diocesana de Migraciones convoca a los malagueños y melillenses a un encuentro para reflexionar y orar por las personas víctimas de la movilidad forzosa. La cita en la capital es el miércoles 11 de enero, a las 20.00 horas, en la plaza de la Constitución. Este mismo día se celebran también Círculos de Silencio en distintos puntos de la provincia: En Álora, a las 18.30 horas, a las puertas de la iglesia de la Veracruz. En Churriana, a las 19.45 horas en la plaza del Mirador. En Arriate, a las 19.00 horas. En Alhaurín de la Torre se celebra el segundo lunes de cada mes a las 19.30 horas. En el arciprestazgo de Ronda, se celebra en la plaza del Socorro de Ronda a las 19.00 h. Los Círculos de Silencio están inspirados en la “no violencia” y comienzan en Francia por iniciativa de un sacerdote franciscano francés, Alain J. Richard, para promover la solidaridad con los inmigrantes y que apela a la conciencia de quienes hacen las leyes, de quienes las aplican y de aquellos en cuyo nombre son hechas. «Si no cambiamos nuestras conciencias, no podremos cambiar el mundo. Ésa es la premisa sobre la que gira este encuentro en el que pueden participar creyentes y no creyentes. En él se invita a todos los asistentes a reflexionar u orar durante media hora, en silencio, sobre el drama que están viviendo los emigrantes y refugiados», afirma Ramón Muñoz, miembro del equipo de la Delegación Diocesana de Migraciones. El objetivo no es promover acciones concretas, sino, como explica Muñoz, que cada persona «a raíz de esta reflexión, se sienta interpelada y urgida a actuar en su propio ambiente acogiendo a estas personas, dándole voz, porque su grito se ha debilitado y silenciado a causa de la indiferencia de los pueblos ricos. No podemos caer nosotros mismos en la indiferencia que humilla, en la habitualidad que anestesia el ánimo, como nos recordaba el papa Francisco en la bula de convocación del Jubileo de la Misericordia. Nuestra denuncia y nuestra presión pueden hacer cambiar la política de nuestros gobiernos». Y añade: «con este gesto queremos hacer realidad la recomendación que nos hacía el Papa a las diócesis, de que la celebración de la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado no se redujera sólo a un hecho puntual. Por eso ponemos en marcha el “Círculo de Silencio” con vocación de perdurabilidad, hasta que los derechos de estos hermanos nuestros sean respetados».