NoticiaCáritas Las Hijas de la Caridad se despiden del Hogar Pozo Dulce Publicado: 20/06/2024: 8937 Entrevista Cáritas Málaga lo anunciaba hace unos días, el jueves 20 de junio, a las 18.00 horas, se celebraría en la iglesia del Sagrado Corazón, en Málaga capital, una Eucaristía de Acción de Gracias por la generosa labor y entrega de las Hijas de la Caridad en el Hogar Pozo Dulce, desde su creación. A las religiosas, que llevan más de 20 años sirviendo a los más pobres de manera incansable en este centro de Cáritas para personas sin hogar, las reclama su Compañía para atender otros proyectos sociales propios que se han ido viendo mermados ante la falta de vocaciones. Los programas religiosos de COPE Málaga hablaron con Sor María Antonia y Sor Josefina, y con la directora del Hogar Pozo Dulce, Belén García. Aquí puedes escuchar el podcast. Así explicaban lo que ha significado para ellas este tiempo de servicio en el Hogar Pozo Dulce, en el programa El Espejo Málaga, un espacio que comenzaba sus emisiones el 22 de diciembre de 2001 con un programa dedicado al Hogar Pozo Dulce que abría sus puertas: ENTREVISTAS. Las Hijas de la Caridad dejan el Hogar Pozo Dulce Belén García Magallanes, directora del Hogar Pozo Dulce ENTREVISTAS. Belén García Magallanes, directora del Hogar Pozo Dulce Sor María Antonia, Hija de la Caridad ENTREVISTAS. Sor María Antonia, Hija de la Caridad en el Hogar Pozo Dulce Sor Josefina, Hija de la Caridad ENTREVISTAS. Sor Josefina, Hija de la Caridad En Pozo Dulce desde el primer momento En la web de Cáritas Málaga explicaban cómo fueron los inicios del Hogar Pozo Dulce: «El 27 de septiembre de 2001, día de San Vicente de Paúl, las Hijas de la Caridad, a petición del obispo D. Antonio Dorado, comienzan a realizar una serie de trabajos organizativos previos a la apertura del Hogar, que fue inaugurado a finales de ese mismo año como fruto del Gran Jubileo del año 2000. »Al frente del proyecto, como directora, se situó Sor Concepción Hernández, una figura clave en sus primeros pasos. Con admirable entrega, asumió esta tarea hasta el año 2016, cuando graves motivos de salud la obligaron a pasar el relevo, dejando atrás, con su partida, una huella imborrable. »Durante los primeros años, la casa contó con el apoyo de un numeroso grupo de hermanas, pero desde hace algún tiempo son solo dos, Sor Josefina y Sor María Antonia, dos mujeres inigualables a las que ni sus más de 80 años consiguen restarles un ápice de entusiasmo y generosidad para la misión que les fue encomendada. Y aunque ellas se ocupan principalmente de la enfermería, de la coordinación en la cocina y de la atención directa de los acogidos, en el Hogar todos coinciden en afirmar que siempre están ahí, dispuestas a echar una mano, en cualquier tarea, las 24 horas del día».