Según informa la Diócesis de Cádiz en su página web:

En este acto canónico y jurísico se han instituido los tribunales propios para hacer el estudio y la investigación del proceso, que se espera que culmine con la beatificación y canonización de María del Prado.

Este acontecimiento, que ha levantado gran expectación entre la familia eclesial del Hogar de Nazaret, ha contado con la asistencia de numerosos representantes de los Hogares de toda España, que se han desplazado para la ocasión a la capital gaditana, así como autoridades civiles, como el alcalde de Cádiz y el alcalde de Miguelturra (Ciudad Real), localidad natal de María del Prado.

El obispo diocesano presidió la ceremonia, acompañado del postulador de la causa y miembro del Hogar de Nazaret en Córdoba, el padre Manuel Jiménez. Mons. Zornoza aseguró que “tenemos hoy un sentimiento de gozo y gratitud por la vida y obra de María del Prado, muy querida para todos nosotros. No tenemos mejor modo de agradecimiento a Dios y a la Iglesia por cuanto hemos recibido a través de la acción generosa de Prado, de su cariño y ejemplo, de su creatividad, y sus iniciativas apostólicas llenas de misericordia. La apertura de su causa de beatificación nos alegra, nos conforta y nos llena de paz”.

Mons. Zornoza hizo un breve repaso de la biografía de la fundadora del Hogar de Nazaret y del carisma de esta institución. Así, afirmó que “María del Prado fue una mujer llena del amor de Dios, y una senda por la que muchos llegaron al Señor. Un ejemplo de caridad fraterna y de generoso y humilde servicio hasta el último suspiro de su vida. María del Prado buscó al Señor en la intimidad, de modo que destacó por su vida de oración profunda, que es el secreto de su labor abnegada y oculta”.

Así, tras la Eucaristía, el obispo diocesano dirigió unas palabras a los asistentes sobre la apertura de este proceso y se dio lectura a una breve biografía de María del Prado Almagro. A continuación, el postulador de la causa, el padre Manuel Jiménez, presentó sus credenciales al Sr. Obispo, y el notario actuario, el padre Didier Octavio Jiménez, leyó el decreto del nombramiento episcopal de tribunal, que fue erigido el pasado 2 de febrero.

Seguidamente, el obispo diocesano invitó a los miembros del tribunal a prestar juramento de sus cargos y de llevar a cabo este cometido, al igual que el postulador.

Por otro lado, la directora general del Hogar de Nazaret, la Hermana Consuelo Csanady, agradeció al Cabildo Catedral, al Vicario Judicial y al obispo diocesano su disponibilidad y acogida para que este acto se pudiera llevar a cabo. “Dios se fija en lo pequeño y en lo humilde para realizar su obra, y Dios se fijó en nuestra querida Madre María del Prado, no para hacer una obra aparatosa, llamativa o de gran impacto. Dios se fijó en María del Prado para que por medio de una vida escondida, una vida sencilla, una vida de trabajo y de oración intensa, se pusiera de manifiesto para muchos un camino de santidad fundamentado en Nazaret”.

La ceremonia finalizó con el reparto de una estampa de María del Prado y una oración especial para encomendar a Dios todos los trabajos que ahora comienzan.

A partir de ahora, una vez abierta la “fase diocesana”, que lleva al estudio preliminar de la fama de santidad de María del Prado, tendrá lugar el proceso de investigación con entrevistas a personas que conocieron o fueron testigos indirectos de la obra de la fundadora del Hogar de Nazaret y de sus escritos o consejos. Una vez finalizada esta fase, toda la documentación será enviada a la Santa Sede para comenzar la “fase romana”, en la que se estudiará todo el trabajo realizado en la Diócesis de Cádiz y Ceuta y, si Su Santidad lo considera oportuno, será declarada Venerable. En cualquier caso, un proceso que no será breve y que conllevará el transcurso de algunos años.

María del Prado Almagro Roldán

La directora general y fundadora de la Asociación Pública de Fieles Hogar de Nazaret falleció el 25 de diciembre de 2017.

María del Prado nació en Miguelturra (Ciudad Real), el 17 de noviembre de 1932. Tras 20 años de apostolado por toda España, inició en Málaga y Córdoba la acogida de menores, y el 3 de junio de 1978 fue reconocida esta Obra por la Iglesia de Córdoba, con el nombre de Hogar de Nazaret. María del Prado, junto con 8 compañeras más, se consagraron en la Iglesia de la Encarnación de Córdoba el 8 de diciembre del mismo año.

Hoy esta Obra está presente en varias diócesis de España, en Ecuador, Perú y República Dominicana y está compuesta por consagradas, consagrados, sacerdotes y laicos procedentes de los movimientos de matrimonios, madres, padres y jóvenes de Hogar de Nazaret.

María del Prado vivió durante 30 años en el Hogar de Chiclana de la Frontera, y desde ahí visitaba el resto de Hogares de España y de Ecuador. Desde 1992 viajó más de 20 veces a Ecuador, estuvo en Perú e impulsó un proyecto misionero en República Dominicana.

Hogar de Nazaret 

La Familia Eclesial Hogar de Nazaret  es una institución de vida consagrada misionera de la Iglesia Católica cuyo carisma se fundamenta en la imitación de la Sagrada Familia de Nazaret. Hogar de Nazaret nace en la Iglesia con el deseo de ofrecer un camino de santidad siguiendo la máxima evangélica «si el grano de trigo que cae en la tierra muere, da fruto»  (Jn 12,24) y con una misión: la de atender desde los valores de la Sagrada Familia de Nazaret a niños y jóvenes en situación de riesgo ofreciéndoles un hogar con un ambiente lo más parecido a una familia.

Desde estos valores, se crean Hogares de menores cuya situación familiar es desfavorable por diversas circunstancias.

Su misión no se limita sólo a ello, sino que, con el deseo de ayudar a la familia en la integridad de todas sus dimensiones se lleva a cabo una pastoral familiar muy amplia.