NoticiaTrata de personas Juntos contra la trata Publicado: 27/01/2020: 15960 Málaga celebra la VI Jornada Mundial de Oración y Reflexión contra la Trata en la festividad de Santa Josefina Bakhita. “Cae en Málaga un red de trata que tatuaba a las mujeres para indicar su propietario”, “La explotación de una menor destapa una red de trata en Málaga”, “Liberan en Málaga a seis pakistaníes explotados laboralmente…”. Son solo algunos de los titulares de periódico que sitúan a Málaga en el foco del tráfico de personas con fines de explotación sexual, laboral o extracción de órganos, uno de los negocios más lucrativos (32.000 millones de dólares al año) y más atroces del mundo. La trata es un problema tan complejo que desborda la capacidad de actuación de la policía. Esta grave violación de los derechos humanos no es solo una actividad delictiva, sino que tiene también componentes que lindan con aspectos como la inmigración, la lucha contra el crimen organizado, el mercado laboral, la economía sumergida, etc. Esto obliga a un trabajo en red por el que apuesta la Iglesia Católica. Desde hace poco más de un año, la Diócesis de Málaga cuenta con un Grupo Intereclesial contra la Trata de Personas, que trabaja en coordinación con la Comisión de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española, y que componen la Delegación Diocesana de Migraciones, Cáritas Diocesana, la Confederación de Religiosos en Málaga, los PP. Trinitarios y las Religiosas Adoratrices. Estas últimas son las únicas que ofrecen un recurso asistencial y de alojamiento para víctimas de trata sujeto al Protocolo Marco de Protección de Víctimas de Trata de Seres Humanos en la provincia. 22 millones de víctimas Los expertos cifran en 22 millones de personas las víctimas de la trata de personas en el mundo, aunque solo 2 millones están identificadas. La mujer es la principal víctima, muchas veces menor de edad, y el fin sexual, el mayoritario. Un gran número llega irregularmente a España como país de destino o tránsito procedente de Nigeria, Colombia, Venezuela, Rumanía y Bulgaria. Como denunciaba un reciente estudio del Defensor del Pueblo, es muy común no detectar a las víctimas de trata en frontera, lo que la deja a merced de una de las peores formas de esclavitud del siglo XXI. El Grupo Intereclesial contra la Trata de Málaga quiere hacer visible a la Iglesia y a la sociedad malagueña este grave problema que afecta a la dignidad de las personas y que constituye una forma invisible de esclavitud actual. Este año, la jornada se fija especialmente en el testimonio de santa Josefina Bakhita, patrona de la víctimas de trata por haberlo sido ella misma, y que constituye un ejemplo de vida y testimonio para combatir las causas de esta herida en el cuerpo de la humanidad y en la carne de Cristo, como lo califica el papa Francisco. Y es que el 8 de febrero se celebra la fiesta de esta santa, víctima de trata desde los 9 años de edad y patrona de quienes siguen sufriendo este drama. Bakhita es testigo del perdón y la misericordia: «Si volviese a encontrar a aquellos negreros que me raptaron y torturaron, me arrodillaría para besar sus manos». Con motivo de la Jornada de Oración y Reflexión Contra la Trata, que se celebra unido a su fiesta, el Grupo Intereclesial ha celebrado una vigilia en la parroquia de la Amargura a las 19.45 horas el día 6 de febrero. «Todo lo que hagamos servirá para promover y motivar la reflexión que nos pide el Papa, que nos permita fundamentar nuestra acción e ir trazando la senda hacia un horizonte donde la esclavitud y la trata de personas, de una vez por todas, forme parte del pasado», afirman.