Anna y Michal Klimont son médicos y se conocieron en la Universidad de Medicina de Poznán, Polonia, a sus 19 años. Gracias a la beca Erasmus, años más tarde decidieron continuar estudiando en Málaga, «donde pasamos el mejor año de nuestros estudios», confiesa el matrimonio. Es aquí donde tomaron la decisión de que se casarían, con 23 años y, desde entonces, «hemos estado buscando razones para volver a Málaga. Fue mi marido Michal quien pensó que el bautizo de nuestro hijo recién nacido sería la razón perfecta para volver, y por supuesto, mucho más especial», detalla Anna.

En su paso por la Facultad de Medicina de Málaga, su coordinador Erasmus fue el profesor Alberto Peláez, quien les ha ayudado a organizar el bautizo del niño, «siempre le estaremos muy agradecidos», explica el matrimonio.