DOMINGO XXVIII T.O.

MONICIÓN DE ENTRADA

En el Domingo, día del Señor, el pueblo cristiano se reúne junto al altar, convocado por Jesucristo.

El pasado día 11, a los 50 años de la apertura del Concilio Vaticano II, el Papa inauguraba en Roma el Año de la Fe, y hoy en nuestra Diócesis, solemnizamos de forma más significativa este tiempo particular de reflexión.

Es una ocasión propicia para profundizar en el acontecimiento fundamental de la fe: “el encuentro con Jesucristo que da nuevos horizontes a nuestra vida”. Una fe que tenemos que redescubrir, cultivar y testimoniar ofreciendo a todos los hombres un camino de salvación y liberación.

Que la celebración de esta eucaristía "sacramento de nuestra fe” y la de cada domingo fortalezca nuestra unión con Jesucristo y nos haga crecer en la comunión con la Iglesia.

Bendición del agua y aspersión(Canto bautismal)

CREDO

A.-Después de la homilía, con estas o parecidas palabras, el sacerdote hace la introducción

El Año de la fe remite al Credo como profesión pública de nuestra fe. Desde los orígenes de la Iglesia, se le entregaba a los adultos que se preparaban para recibir el Bautismo.

Durante una celebración apropiada los catecúmenos escuchaban por primera vez al sacerdote que recitaba el Credo y después tenían que aprenderlo de memoria para restituirlo, es decir, profesarlo públicamente durante otra celebración.

El Santo Padre nos invita a reflexionar sobre el texto del Credo y sobre los contenidos a los que remite.

Ahora, yo os entrego el símbolo de nuestra fe. En adelante tratad de aprendéroslo de memoria y de repetirlo en la oración diaria para dar testimonio del mismo con la propia vida.

El sacerdote puede entregar el Credo (en una estampa o cartulina). Si es necesario puede ser ayudado por los catequistas.

B.-Terminada la entrega se reza el CREDO

C.-Al terminar la profesión de fe, el sacerdote dice con las manos extendidas:

Dios, Padre nuestro, te rogamos

que concedas a tus fieles acoger la gracia

de la fe con corazón renovado

para que sepan reconocerte como único Dios,

y a aquel que has enviado: Jesucristo.

Haz que se dejen guiar por tu Espíritu santo

a lo largo de todo este año,

de modo que puedan avanzar en el camino

de la fe con corazón gozoso,

y ser para sus hermanos y hermanas

testigos de tu amor

atrayendo nuevos hijos a ti.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amen.

ORACIÓN DE LOS FIELES

Oremos, hermanos, a Dios Padre Todopoderoso para que, por medio del Espíritu, nos acompañe y fortalezca en este camino espiritual de la Iglesia en el Año de la Fe.

-Por la Iglesia, por el Papa Benedicto, por los obispos, presbíteros y diáconos para que vivan y anuncie con fidelidad y constancia la fe en Jesucristo hasta el final de los tiempos

(Cantado)Roguemos al Señor o (Dominum deprecemur)

R/ Te rogamos, óyenos (Te rogamus audinos)

-Por la Iglesia Diocesana da Málaga presidida en la caridad por el Obispo Jesús: para que este Año de la Fe nos ayude a valorar el don recibido, a crecer en la comunión eclesial y a agradecer el ejemplo de entrega y fidelidad de cuantos nos han precedido en el amor a Jesucristo y el servicio a la Iglesia.

R/Roguemos al Señor

-Por los jóvenes: que se abran a la llamada de Dios para que no falten en la Iglesia las vocaciones sacerdotales y religiosas que hoy necesitamos.

R/Roguemos al Señor

-Por los que rigen los destinos de los pueblos: para que trabajen por el bien y la unidad de la familia humana.

R/Roguemos al Señor

-Por los que buscan sinceramente, por los que no conocen o no quieren conocer a Jesucristo: para que encuentren la luz que buscan y, encontrándola, la contemplen con alegría.

            R/ Roguemos al Señor

-Por cuantos estamos aquí reunidos y por todos los cristianos: para que, en este Año de la Fe, valoremos más la Eucaristía del domingo como cumbre y fuente de nuestra vida cristiana

R/ Roguemos al Señor

Dios y Señor nuestro, escucha las oraciones que en nombre de toda la Iglesia te hemos presentado para que alientes nuestra fe, fortalezcas nuestra esperanza y nos afiances en el amor.

Por Jesucristo nuestro Señor.