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Celebración ecuménica con motivo de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos (Catedral-Málaga)

Publicado: 22/01/2017: 1855

Homilía pronunciada por el Obispo de Málaga, Jesús Catalá, en la Celebración ecuménica con motivo de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, el 22 de enero, en la Catedral de Málaga.

CELEBRACIÓN ECUMÉNICA
CON MOTIVO DE LA SEMANA DE ORACIÓN
POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS
(Catedral-Málaga, 22 enero 2017)

Lecturas: 2 Co 5,14-20.

Reconciliación. El amor de Cristo nos apremia (2 Co 5, 14-20)

1.- El apóstol Pablo, en su primera carta a los Corintios, nos recuerda que vivir en Cristo nos hace criaturas nuevas: «Si alguno está en Cristo es una criatura nueva. Lo viejo ha pasado, ha comenzado lo nuevo» (2 Co 5,17). Hay una radical novedad en la vida del cristiano. El hombre viejo, dañado y ensombrecido por el pecado, se convierte en una nueva criatura, iluminada por la gracia. Su vida adquiere un sentido más pleno y profundo; y la iluminación recibida le hace capaz de iluminar la vida de los demás. Seamos, queridos cristianos, luz para nuestros contemporáneos.

2.- El cristiano no puede vivir para sí mismo, sino para Cristo, porque «Cristo murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí, sino para el que murió y resucitó por ellos» (2 Co 5,15). Estamos llamados a vivir con Cristo y para Cristo. Él debe ser el centro de nuestra vida; Él es quien da sentido y valor a nuestra vida, porque la ha rescatado del pecado y de la muerte. Por ello, como dice san Pablo: «Nos apremia el amor de Cristo» (2 Co 5,14).

3.- Hemos sido reconciliados con Dios por medio de Cristo (cf. 2 Co 5,18), quien ha pagado el precio de nuestro rescate (cf. Mt 20,28); ha abierto el camino hacia Dios, que estaba cortado por el pecado; ha derribado el muro que separaba a los pueblos (cf. Ef 2,14); ha traído la fraternidad entre todos los hombres; y «ha puesto en nosotros el mensaje de la reconciliación» (2 Co 5,19). ¡Qué maravilla! Una vez reconciliados con Dios podemos anunciar la buena nueva de la reconciliación. Somos embajadores de Cristo (cf. 2 Co 5,20), pregoneros de la reconciliación y agentes de paz. Esta reconciliación es universal, abarcando todas las dimensiones y relaciones: cósmicas, humanas y con la naturaleza. Trabajemos por la reconciliación con Dios, con los hombres y con la creación entera.

4.- La exhortación apostólica del papa Francisco, La alegría del Evangelio (2013), ha aportado el tema de este año, al utilizar la cita: «El amor de Cristo nos apremia»: “El bien siempre tiende a comunicarse. Toda experiencia auténtica de verdad y de belleza busca por sí misma su expansión, y cualquier persona que viva una profunda liberación adquiere mayor sensibilidad ante las necesidades de los demás” (Evangelii gaudium, 9). La expresión de san Pablo «El amor de Cristo nos apremia» (2 Co 5,14) es un estímulo para todos nosotros, queridos hermanos procedentes de diversas iglesias cristianas. No podemos paralizarnos, ni bloquear nuestras relaciones fraternas por motivos simplemente humanos, por razones históricas o por puntos de vista subjetivos. Como san Pablo deberíamos exclamar: «¡Ay de mí, si no anunciara el Evangelio!» (1 Co 9,16). Y decir también: “¡Ay de mí, si no acorto distancias con el hermano de otra iglesia o comunidad cristiana!

5.- En este año se celebra el quinientos Aniversario de la Reforma Luterana, que ha marcado dolorosamente la vida de la iglesia en Occidente. Las iglesias de Alemania han acordado conmemorar ecuménicamente la Reforma con una “Christusfest”, una celebración de Cristo. De este modo se pone el énfasis en Jesucristo y en su obra reconciliadora como centro de la fe cristiana. Se ha recorrido un camino de diálogo, de conocimiento mutuo y de entendimiento. En esta Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos damos gracias a Dios por el trabajo ecuménico realizado y nos comprometemos todos a seguir caminando hacia la plena unidad en Cristo. Amén. (Este párrafo sobre la Reforma Luterana fue leído por el Obispo en español y en alemán, en reconocimiento a este hecho histórico).

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