El domingo 19 de febrero, el Señor Obispo fue recibido en la puerta de la Iglesia de la Parroquia de Ntra. Sra. de los Dolores, en Villanueva del Trabuco, por sus sacerdotes, D. Antonio Ramos y D. Luis Alberto Quijada. Después de una oración ante el Sagrario y otra con motivo de la visita pastoral, el Obispo confesó algunos fieles y celebró la Eucaristía, en una Iglesia abarrotada de asistentes. A continuación, dio inicio una asamblea parroquial donde participaron todos los grupos de la Parroquia: liturgia, economía, Cáritas, pastoral juvenil, Grupo Mies, catequistas, Cofradía, pastoral de la salud, Asociación de San Isidro, Asociación de San Antonio, Asociación de San Juan, Grupo “Virgen del Puente” y un numeroso grupo de confirmación.

Asimismo, tuvo un encuentro con los 135 niños que se preparan en la catequesis de iniciación cristiana, acompañados de sus padres.

Por la tarde, Don Jesús fue el cementerio de la localidad, donde hizo un responso. Después se dirigió a la Capilla de San Isidro, en el Cortijo “Las Beatas”, para hacer una oración y tener un encuentro con la gente.

El día terminó visitando la Parroquia del Purísimo Corazón de María, en Estación de Salinas, para rezar ante la Virgen y encontrarse con los fieles de la Parroquia. Y por último, volvió a Villanueva del Trabuco para llevar la comunión a varios enfermos de la Parroquia.

El sábado 25 de febrero, el Señor Obispo, realizó la visita pastoral a la Parroquia de Ntra. Sra. del Rosario, en Villanueva del Rosario, donde inició con el saludo de los sacerdotes Antonio y Luis, y la presentación y diálogo con los grupos de la Parroquia, niños de catequesis y sus padres y otros fieles presentes.

A mediodía, visitó la parroquia de la Santa Cruz, en Villanueva de Cauche, donde celebró la Eucaristía y conversó con los fieles. Después, acudió a la Capilla-Escuela del Puerto del Barco, para encontrarse con la gente de la pedanía.

Por la tarde, realizó una oración en la capilla del cementerio de Villanueva del Rosario. También visitó la residencia de ancianos, donde rezó con ellos y les impuso las manos, y llevó la comunión a varios enfermos de la Parroquia.

La visita pastoral concluyó con las confesiones y la celebración de la Santa Misa.

Esta visita supone un momento de gracia y bendición de Dios, donde el Obispo de Málaga, como pastor de la Diócesis y sucesor de los apóstoles, viene a reafirmar nuestra fe, a animarla y ayudarnos a ser testigos del Señor en nuestros pueblos; también sirve para estrechar los lazos de comunión entre el obispo, los sacerdotes y los fieles laicos.

Luis Alberto Quijada Ríos, párroco