NoticiaReligiosas «Pude reconstruir mi vida y abrirme un camino hacia la libertad» Publicado: 29/07/2023: 4485 Trata El 30 de julio es el Día Mundial contra la Trata. Las religiosas Adoratrices atendieron en su provincia de Europa y África alrededor de un millar de mujeres en situaciones de trata en el año 2022, el 85% con fines de explotación sexual, como ésta de la que la Delegación de Migraciones de Málaga ofrece su testimonio. Casi un millar de mujeres víctimas de trata han sido atendidas por las Adoratrices en el trascurso del año pasado. Todas ellas, a través de los programas y proyectos que la congregación tiene en los lugares en que tiene presencia, entre ellos Málaga, ofreciendo a las mujeres que se encuentran en esta situación desde asistencia legal hasta acompañamiento psicológico y laboral. Desde la Delegación de Migraciones de Málaga (en su comisión de trata) comparten un testimonio de vida de una mujer que ha sido atendida por la Obra Social Adoratrices, que, desde su misión en el mundo, ofrece a estas mujeres un apoyo en su liberación y una oportunidad para la reconstrucción hacia una vida plena e independiente. «Un día mis padres deciden venderme a una familia polaca que reside en España por 3.600 euros. A partir de este momento soy obligada a ser pareja del hijo de 15 años de la familia. Yo contaba en ese momento con 14 años. A su vez, este chico también fue comprado por la misma familia polaca. Durante un año y cuatro meses estuve obligada a mendigar y trabajar vendiendo flores y entregando todo el dinero obtenido a mi “suegra”. Si la cantidad era inferior a lo esperado, era insultada y golpeada. Diariamente, a las 7.00 de la mañana, me trasladaban a algún pueblo o localidad de alrededor, me dejaban sola y me recogían a las 12.00 de la noche para el ejercicio de la mendicidad. Retuvieron mi documentación y me privaron de toda libertad, no podía salir sola a la calle, salvo cuando me obligaban a trabajar o mendigar. También me forzaron a mantener relaciones sexuales con el chico con el me impusieron estar. Obviamente relaciones no consentidas. Lo pasé muy mal, no sabía cómo salir de esta situación. Por si fuera poco lo que tuve que sufrir, me quedé embarazada de este chico (tras un aborto natural previo). Durante el embarazo me obligaron a seguir trabajando en las mismas condiciones. Si ya era difícil todo, estando embarazada la cosa era aún peor. Incluso me privaban de comer. Cuando tenía apenas 15 años, nació mi hija. A partir de este momento la situación empeora. Me impiden mantener relación con mi propia hija, siendo mi “suegra” quien se hacía cargo. Yo, en contra de mi voluntad, tenía que ocuparme de la casa, trabajar y mendigar. La bebé dormía con mi “suegra”. No podía disponer de mi propia hija. Fue horrible el no poder tenerla cerca. Buscando una salida, decido llamar a una mujer que me ofreció su ayuda. Esta mujer trabajaba en una frutería y siempre me veía mendigar. Así que, un día, se acercó a mí y mostró su preocupación, por lo que empezamos a tener una amistad. Gracias a esto, conseguí su contacto y pude pedir ayuda. Por suerte, mi amiga pudo refugiarme en su casa. Acudo a la policía para solicitar ayuda. Ese mismo día me ingresaron en un centro de menores y, al cumplir la mayoría de edad, fui acogida en el programa "Vive y Camina" de Adoratrices de Málaga. Aquí pude reconstruir mi vida y abrirme un camino hacia la libertad y la autonomía». ADORATRICES Al igual que este caso, miles de mujeres son liberadas ante situaciones de esclavitud moderna. La Congregación de Religiosas Adoratrices está presente en 25 países con proyectos que luchan para que situaciones de trata de seres humanos como esta no se repitan. En Málaga Adoratrices lleva presente desde 1906. Hoy en día desarrollan un programa de atención integral a víctimas de situaciones de trata y mujeres vulnerables en contextos de violencia sexual, física o psicológica. Son atendidas de manera multidisciplinar con el objetivo de conseguir una inserción social de forma digna y con plenos derechos. Se trabaja desde el carisma adoratriz de su fundadora Santa María Micaela. Concretamente, por el amor hacia las mujeres e implicación en la lucha, sensibilización de este problema social y la recuperación de la dignidad de la mujer. Lee más