Spellman, desembarcó en Málaga con un grupo de 600 peregrinos, al ir camino de Lourdes. Según afirman las crónicas de la época, el Cardenal visitó el Castillo de Gibralfaro y «la nueva barriada del Generalísimo Franco, edificada en los terrenos de Carranque, visitando el templo de San José, la Casa Sacerdotal y otros edificios principales de este núcleo».

Ese año Málaga sufrió unas graves inundaciones que dejaron sin techo a más de tres mil personas, ya que, como recogía el Diario Sur, solo tres años antes las lluvias ya «se habían cebado con el núcleo de chabolas de Arroyo del Cuarto así como otras concentraciones de infraviviendas -La Pellejera, Mangas Verdes, Cuevas del Ejido o Colonia de Santa Inés». La ciudad entera se movilizó en la denominada "Operación Corazón". El alcalde de entonces era Francisco García Grana, «cuyo nombre quedará asociado a estos años clave del desarrollo de la ciudad» como afirmaba la prensa.